[1] Comp. Moyn, «In the Aftermath». Las interpretaciones de este apartado se siguen de argumentos que están documentados en los capítulos previos; por ello, las notas son reducidas. <<
[2] Quizá un millón de personas muriera en los campos alemanes (diferenciándolos de las instalaciones de exterminio y de los lugares de inanición). Véase Orth, System. <<
[3] Comp. Keegan, Face of Battle, 55; y Gerlachy Werth, «State Violence», 133. <<
[4] La mayoría de los demás que murieron de hambre estaban en Kazajistan. Cuento las muertes de Ucrania como intencionadas y las de Kazajistan como previsibles. Investigaciones futuras podrían cambiar la estimación de intencionalidad. <<
[5] Esta y la cita siguientes siguen la traducción de Chandler de Everytbing Flows [«Todo fluye»] (2010) no publicada en el momento de escribir estas lineas. Véase también Life and Fate [«Vida y destino»]. <<
[6] Una larga discusión sobre la economía y la moral de la tierra y el asesinato se encuentra en Kiernan, Blooa and Soil. <<
[7] La China de Mao supero a la Alemania de Hitler en la hambruna de 1958-1960, que mato a unos treinta millones de personas. <<
[8] Para «complicidad beligerante», véase Furet, Fascism and Communism, 2. Comp. Edele, «States», 348. Cita de Hitler: Lück, «Partisanbekämpfung», 228. <<
[9] Todorov, Mémoire du mal, 90. <<
[10] Milgram, «Behavior Study», aún merece una lectura. <<
[11] Kołakowski, Main Currents, 43. <<
[12] Sobre la pasividad internacional, véase Power, Problem. <<
[13] Fest, Das Gesicht, 108, 162. <<
[14] Como señala Harold James, en la actualidad las teorias sobre la modernizacion violenta salen malparadas en términos puramente económicos; véase Europe Reborn, 26. Cita de Buber-Neumann: Under Two Dictators, 35. <<
[15] El crimen soviético más significativo en Rusia fue dejar morir de hambre deliberadamente a Leningrado, donde pereció en torno a un millón de personas. Los alemanes mataron a un número relativamente pequeño de judíos en la Rusia soviética, quizá a sesenta mil. También mataron al menos a un millón de prisioneros de guerra de la Rusia soviética en los dulag y los stalag. En las estimaciones soviéticas y rusas, estas personas se contaban usualmente como bajas militares; puesto que yo las cuento como víctimas de una política de asesinato deliberado, incremento la estimación de 1,8 millones dada por Filimoshin, «Ob itogakh», 124. Creo que el cálculo ruso de muertes en Leningrado se queda corto en unas cuatrocientas mil personas, de modo que añado también esta cantidad. Si Boris Sokolov está en lo cierto y las bajas militares soviéticas fueron mucho más altas que las cifras convencionales, entonces la mayoría de las personas contadas en los cálculos más elevados fueron soldados. En cambio, si Ellman y Maksudov tienen razón y 550 Tierras de sangre las bajas militares soviéticas fueron en realidad menores, entonces la mayoría de estas personas eran civiles y, a menudo, civiles que no estaban bajo la ocupación alemana. Véase Sokolov, «How to Count», 451-457, y Ellman, «Soviet Deaths», 674-680. <<
[16] Sobre las muertes de 516 841 internados en el Gulag, véase Zemskov, «Smertnost’», 176. Sobre los cuatro millones de ciudadanos soviéticos en el Gulag (incluidos los asentamientos especiales), véase Khlevniuk, Gulag, 307. <<
[17] Brandon y Lower calculan entre 5,5 y 7 millones el total de pérdidas humanas en la Ucrania soviética durante la guerra; véase la Introducción, 11. <<
[18] Para una introducción a la cultura de la memoria, véase Goujon, «Memorial». <<
[19] Las discusiones sobre las cifras están documentadas en los capítulos previos, aquí y en todo este apartado. <<
[20] Janion, Do Europy. Sobre Berman, véase Gniazdowski, «’Ustalić liczbę». <<