Esta es, ante todo, una historia de amor donde los personajes son reales a ratos, dependiendo del estado de la conexión a Internet.

También es, incidentalmente, la crónica de los Cuatro Días Más Importantes de Todos.

Podría comenzar con el terror desatado en un zoológico en las afueras de París; o, retrocediendo al siglo XVII, con lo que el vástago de una familia de músicos alemanes supo el día en que perdió a su padre; o, si prefieres algo más exótico, a dieciocho millones de kilómetros de la Tierra, fuera del Sistema Solar, en una sonda espacial.

Todos ellos serían buenos comienzos.

Pero creo que empezaré con una madre soltera en paro que buscaba trabajo.

Por una razón: ella es la más importante de los Cuatro Días Más Importantes.

Al menos para mí.