El sistema de retribuciones que tú has construido para escoger la ira
A fin de aplacar tu mal genio, lo más efectivo es empezar a percibir las razones que se tienen para usarlo. He aquí algunas de las motivaciones psicológicas para mantener en funcionamiento ese mal genio:
- Cuando se te hace difícil controlarte, te sientes frustrado o derrotado, te es posible usar la rabia para trasladar la responsabilidad de lo que sientes a otra persona u otro suceso en vez de dominar tus propios sentimientos.
- Puedes utilizar la ira para manipular a los que te tienen miedo. Esto es especialmente efectivo con los que son más jóvenes o más pequeños, física o psicológicamente.
- Los accesos de ira atraen la atención de los demás y así logras sentirte importante y poderoso.
- La ira es una excusa muy cómoda. Puedes volverte loco -temporalmente- y luego disculparte diciendo: "No pude evitarlo". Así puedes exonerar tu comportamiento con una lógica de descontrol.
- Consigues lo que quieres porque los demás prefieren aplacarte que tener que tolerar tus rabietas y ataques de ira.
- Si le tienes miedo al amor o a la intimidad, puedes enfadarte por algo y evitar de ese modo el riesgo de compartir algo emocionalmente.
- Puedes manipular a los demás por medio de la culpa haciendo que se pregunten: "¿Qué hice yo para que se enfade de esta manera?,. Cuando los demás se sienten culpables, tú eres poderoso.
- Puedes bloquear la comunicación cuando te sientes amenazado porque alguien es más hábil que tú. Usas la rabia para evitar el riesgo de quedar en inferioridad de condiciones.
- No tienes que ocuparte de ti mismo cuando estás enfadado. De ese modo puedes usar tus momentos presentes de una manera muy fácil al estar furioso y evitar hacer lo que sea necesario para mejorarte a ti mismo.
- Utilizas la ira para desahogarte.
- Puedes sumirte en una profunda compasión de ti mismo después de un ataque de rabia, compadecerte de ti mismo porque nadie te comprende.
- Puedes evitar pensar con lucidez por el mero hecho de enfadarte.
- Todo el mundo sabe que no puedes pensar claramente en esos momentos. Así que ¿por qué no echar mano de la vieja ira cuando quieres evitar el pensar con rectitud y claridad?
- Puedes usarla como excusa por un fracaso o por tu falta de capacidad. Incluso puedes llegar a evitar que los demás te ganen debido al miedo que inspiran tus accesos de mal humor.
- Puedes utilizar la rabia como excusa diciendo que la necesitas para poder realizar algún trabajo específico, pero en realidad la ira es un comportamiento inmovilizador y no ayuda a trabajar bien.
- Al decir que la ira es humana, tienes a mano la justificación para tu comportamiento: "Yo soy un ser humano y así funcionan los seres humanos".