[¿Finales de julio de 1904?]

60 Shelbourne Road, Dublín

Mi iracunda Nora, te dije que te escribiría. Ahora me escribes y me preguntas qué demonios me pasaba la otra noche. Estoy seguro de que algo anduvo mal. Me mirabas como si estuvieras triste por algo que no había ocurrido, y que habría podido gustarte mucho. Desde entonces he tratado de consolarme, pero no lo consigo. ¿Dónde estarás el sábado, el domingo, el lunes por la noche, para que no pueda verte? Ahora, querida, adiós. Beso el milagroso hoyuelo de tu cuello. Tu Hermano Cristiano en la lujuria.

La próxima vez, cuando vengas, deja tu enojo en casa… y también el corsé.

J. A. J.