Julio Anguita fue el diputado andaluz que en el debate de la reforma agraria le dijo al PSOE que su proyecto no era el que necesitaba Andalucía, ofreciendo otro. Claro está que perdieron la votación.
—¿Cuál se llevó a cabo?
—Al final no se llevó a cabo ninguno. Tampoco el suyo, que lo abandonaron. Lo aprobaron y lo abandonaron. En todos estos años no se ha llevado a cabo ninguno. Ellos aprobaron el suyo y crearon ciertas instancias, hicieron algunos experimentos, pero aquello se olvidó. Por eso el Sindicato Andaluz de Trabajadores está luchando como está luchando, con Gordillo y Diego Cañamero a la cabeza. Yo fui el diputado del debate de la enmienda a la totalidad. Recuerdo lo que me dijo un diputado del PP tras mi intervención en el Parlamento Andaluz. No se me olvidará esto en la vida. Fue un tal García de Sola. Me dijo: «Después de que te he oído hablar en el Parlamento, he acudido a la iglesia para que Dios me reconforte porque te he visto un poder de persuasión que me has parecido Satanás». Supuse que lo diría porque mi intervención no es nada dura en las formas, pero tremendamente demoledora en los contenidos. El hombre sintió que yo era Satanás que le estaba encantando.
—¿Qué dijiste en la Cámara?
—Que estábamos ante un problema enraizado en la historia de Andalucía (lo recuerda de memoria), que había motivado el nacionalismo, que era tremendamente injusto, que ni siquiera a las luces del capitalismo era posible mantener la situación… argumentos de cajón. Hay que tener en cuenta que ellos vivían en un mundo fuera de la realidad, que el capitalismo y los potentados andaluces han sido cosas reñidas. Ellos no han querido que se instalen fábricas porque se les iba la mano de obra. En Andalucía pudo haber una industrialización en los Altos Hornos de Marbella en pleno siglo XIX con los hermanos Heredia, pero los oligarcas andaluces se encargaron de que aquí no hubiera industria. Ellos sabían lo que hacían, y con ellos llega a un acuerdo el capital vasco y el capital catalán en la España de la Restauración. Eso es así. Manteniendo cada uno su esfera y su ámbito de operatividad.