Paul Colinet

LA CASA PERFECTA

El albañil había olvidado construir las paredes y la casa estaba llena de nubes.

Se envió a las dos ventanas al bosque a buscar al albañil.

Se fueron, cogidas de la mano, como huérfanas blancas: no volvieron jamás.

En cuanto al albañil, permanecerá para siempre invisible: profundamente oculto y dormido en una nube.

Paul Colinet, Les Histoires de la Lampe.