María Bonazzi y Umberto Eco

CÓMO ELIMINAR A LOS POBRES

San Francisco encuentra a un pobre leproso

y le da una limosna, luego se va.

Reflexiona, sin embargo, vuelve

y lo besa en las llagas diciéndole: «¡Hermano!».

El pobre se lo agradeció con una sonrisa luminosa. El caballero volvió a montar en su caballo y reinició su marcha con el corazón aliviado.

Poco después se volvió para saludar con la mano al leproso; este ya no estaba. En su lugar había florecido una rosa.

María Bonazzi & Umberto Eco, I pampini bugiardi.