RED DE REDES

Para él las redes siempre fueron familiares. Sus mayores habían hecho un fortunón fabricándolas. Redes para pescar, redes para porterías de los campos de fútbol. Ahora la economía familiar se tambaleaba. Él comenzaba a despuntar y tenía soluciones. Ellos lo ignoraban. Pero, hagamos un poco de historia:

Su familia, la familia Tejedor, «los Tejedores» o «los Primitivos», como les llamaban en su pueblo de las Rías Altas gallegas, se había dedicado de toda la vida a fabricarlas.

Sus abuelos, Primitivo Tejedor García y Primitiva Tejedor Fernández, empezaron modestamente: tejían paños de redes de pesca y más tarde toda clase de redes. Ella tejía y tejía, y él salía con su carro primero y con su furgonetilla después a vender su producto.

El primitivo taller llegó a ser una fábrica puntera. Los primitivos ahorros llegaron a ser un fortunón. La primitiva casa llegó a ser un pazo de no te menees. La primitiva empresa se llegó a convertir en Redes Primitivas, S.A. Tuvieron hijos e hijas y también los metieron en las redes. Poco a poco se hicieron famosos en toda España; tenían a toda España en sus redes.

Su padre, Primitivo Tejedor Tejedor, Primi o El Gordo de la Primitiva, el que menos tejía de la familia, era un obeso vividor que se comía y bebía todo; siempre fue un vago y cuando le decían que echara una mano contestaba:

—¡Ah, las redes son oficio de mulleres!

¡Vaya morro le echaba Primi!

El capital oriental estaba comprando todas las empresas de la competencia e iban decididamente a por los Primitivos. Por eso el abuelo, que además estaba muy enfermo, tenía gran preocupación.

Él, nuestro protagonista, también era Primitivo, Primitivo Tejedor Bono, pero era menos primitivo que sus mayores, había evolucionado. Estudió en un gran colegio en Inglaterra, donde desde un principio le llamaron Red, por el color de su pelo. Allí se había codeado con alevines de familias ilustres de medio mundo y aprendió todos los secretos de la informática. Red arrasaba con los ordenadores, aunque curiosamente el inglés lo hacía a su manera; en eso sí que era primitivo.

Pero, no podía ser de otra forma, a él también le tiraban las redes, pero otra clase de redes: las informáticas. Decía que su afición era ganar mucho dinero, por eso sus amigos del pueblo le llamaban Bono Loto, que su futuro estaba en la red y estaba preparando una buena para poder dar el salto cuando fuera necesario.

Los Primitivos Tejedores mayores ignoraban que tenían la solución en casa; eran muy primitivos. Continuamente el abuelo decía a Primi:

—Primi, estoy muy preocupado. Eres un desastre, estás dejando que as nosas redes caigan nas redes dos orientales e non faces nada. Non te preocupas do negocio, eu xa son moi maior e estou moi enfernto, e ademais o teu filio é un desastre, aos seus diecioito anos está todo o día enganchado ao ordenador.

—No te preocupes, padre, Primitivín vale y yo, yo te juro que hago lo que puedo.

Un buen día el nieto le dijo que tenía que darle una noticia.

—Abuelo, he convocado un chat en intemet para que todos los orientales fabricantes de redes de la zona norte acudan mañana a las cinco en punto.

—Ves, Primi, eu xa te o dicía, este rapaz está atontado; filio de porco, marrán seguro. ¿De qué estás falando? Falemos claro entre Primitivos.

—Nada, abuelo, que mañana vamos a ver de cerca las ideas de nuestros oponentes.

—Explícate, necio, vais a acabar conmigo. ¡En boas mans deixo as miñas redes!

El niño había mandado un emilio que decía:

—Dears colleagues of the nets on the net: my grand father have a factory of nets, now we have problems because my father likes to give himself the father’s life. If you can to trow one hand on our nets, tomorrow we can have a chat on Primitivos.por@@.nets. (Queridos colegas de las redes en la red: mi abuelo tiene una fábrica de redes, ahora tenemos problemas porque a mi padre le gusta pegarse la vida padre. Si podéis echarnos una mano en nuestras redes, mañana podemos tener una tertulia en Primitivos.por arrobas.redes).

Llegó el día acordado y el Primitivo chico se llevó un chasco. Sólo acudieron dos curiosos a su llamada.

—¿Qué tal ese chato? —le preguntó su abuelo.

—Chat, abuelo. Nada: los de siempre. Nos quieren comprar a bajo precio la empresa y el pazo, sobre todo el pazo.

—¿Sabes cuánto nos ha costado chegar hasta aquí? ¿Vender mal? ¡Endexamais!

El niño se siguió estrujando el melón y decidió poner publicidad en Internet.

—We sale nets on the net! Primitivos.por@@.nets.

Esto ya fue otra cosa. Al día siguiente recibió más de cien respuestas. Pero sólo estaba palpando el mercado, su momento aún no había llegado.

—Abuelo, he recibido más de cien emilios…

—Pero tú eres idiota, fillo, non ternos bastante con tanto Primitivo y ahora cien Emilios. ¡Que se vayan!

—No, abuelo, emilios son correos electrónicos. Todos están interesados en la compra de redes. —¿Queren comprarnos redes?

—Bueno, no son las redes que tú crees, pero yo me entiendo.

—Primi, este rapaz está colgao. Mira a ver lo que ha feito —dijo a su hijo.

Red había recibido contestación de un montón de gente interesada en la instalación de redes informáticas. ¿Cómo se lo iba a explicar a sus mayores? Ellos ya sólo querían ver dinero. Él tenía que seguir su trabajo. Siguió y no paró. Ya no podía parar.

Un día convocó a los interesados de la zona norte a una convención en su pueblo, pero lo hizo ofreciendo comida y alojamiento gratis. Esta vez fue demasiado lejos.

Como si de una romería se tratase, el pueblo se fue llenando de buitres. Se formó una cola en la entrada de la finca de los Tejedor de más de cincuenta personas. Primi avisó corriendo a su padre:

—Papá, que han llegado un montón de Emilios. Están todos a la puerta y dicen que el nene les ha ofrecido alojamiento.

Primitivo que ya no podía más, dio síntomas de ponerse muy malo y dijo:

—Pois agora me morro.

Y palmó.

En los días siguientes, Primi y su hijo tuvieron esta conversación:

—Hijo, ¿qué vas a hacer para que yo siga viviendo así?

—No sé, padre, pero se me está ocurriendo acudir al Golfo.

—Bueno, para golfos estamos. ¿Te parece poco con nosotros dos?

—No, papá, no entiendes nada, me refiero al Golfo Pérsico. ¿Te acuerdas de esos del pueblo que se marcharon a Qatar?

—¿A catar qué? No, no recuerdo.

—Sí, hombre, aquel que mandó a estudiar a su hija Mar conmigo a Inglaterra, el que hizo el MIR en la marina mercante.

—¡Ah!, sí, hombre. Emilio el emir, el famoso doctor Bolinga. ¿Sabes algo de él?

—Sí.

—¿Y qué se te ha ocurrido?

—Verás: su hija Mar era una buena colega en el school, ¿recuerdas cuando formamos La Banda Inglesa? Bueno, pues ahora ellos están en la emiración y me he acordado de que cuando vino el año pasado al pueblo, a ver a sus abuelos, me contó que su padre tenía tanto dinero que compraba de todo, incluso cosas inútiles, y que tenía un almacén repleto. Le quiero vender todo el stock y la maquinaria, así tiraremos un tiempo.

—¿Has dicho en la emiración?

—Sí es que ahora él trabaja de emir, es el único gallego que no emigró; él emiró.

—Bueno, tú verás. O arreglas esto o volveremos a vivir primitivamente.

—Palabra de Primitivo: donde eche nuestras redes volveremos a triunfar.

—Pero… parece que lo tienes a huevo.

—¿Has dicho a huevo, papá?

—Sí, he dicho a huevo.

—Menuda idea me has dado: ése será en nombre de mi nueva empresa: Red@Webo.

—Pero ¿se puede saber de qué empresa hablas?

—Tú déjame trabajar unos días y ya verás.

Primitivo chico era un monstruo y en pocos días habfa lanzado Red@Webo. Lo primero que hizo fue escribir a Mar la del E.Mir.

Mar Revuelta y sus padres eran naturales del mismo pueblo que los Primitivos, y llevaban varios años viviendo como reyes en los Emiratos Árabes por una confusión tonta. El padre de Mar, Emilio, en cierta ocasión tuvo que intervenir de urgencia pues un emir estaba en alta mar en su yate, se puso muy enfermo y no había quien diera con un remedio para curarle. El intervino y luego dejó su tarjeta en la que ponía: E.MIR. Le confundieron con un descendiente de un emir en el exilio y él se dejó querer.

Primitivo chico envió un emilio a Mar para pedirle ayuda:

—What about your body, dear coolleague Sea? (lo de cool es porque era muy fresca). If you want to help my family, talk with your father about the purchase of our stock of nets and other things, it comes to the hair. If not… I sing all about the true history of doctor Bolinga, from p to pa. Ah, it feels! Help me. Your friend Primitivo, Red.

(Qué pasa con tu cuerpo, querida colega Mar? Si quieres ayudar a mi familia, habla con tu padre sobre la compra de nuestro stock de redes y otras cosas, nos viene al pelo. Si no… canto todo sobre la verdadera historia del doctor Bolinga, de pe a pa. ¡Ah, se siente! Ayúdame. Tu amigo Primitivo, Red).

Al cabo de unas horas, Primitivo recibió el siguiente emilio:

—Hellow, Red, cabroncete:

My father want to buy. I say yes! (Mi padre quiere comprar. Digo sí).

Así fue como en pocas semanas se había desmantelado todo el tinglado. No quedó ni un metro de red en el almacén y ni un solo tornillo en la fábrica.

Ya se había resuelto una parte del problema. Ahora había que empezar a ganar dinero nuevamente. Red puso en marcha sus planes.

Lo primero que hizo fue constituirse en núcleo de una red de información inexistente. Para acceder a ella había que descifrar enigmas y pagar, sobre todo pagar. Todo el que quisiera entrar a formar parte de la red tenía que saber responder alguna pregunta de las planteadas en la página Web de recibimiento y pagar. También podía demandar alguna información importante y pagar. Sólo si las respuestas y las preguntas eran del interés de Primitivo podrían acceder.

Preparó una página muy atractiva. De fondo, no podía ser de otra forma, se veía el entramado de una red y sobreimpresos estaban el nombre de la empresa RED@WEBO y el siguiente mensaje:

—Hello all the colleagues in Internet. Here RED@WEBO.com.o.ben, from Galicia. I pretend this site was in the future till the flag. I need links to my page. Also we will made chats and we can enjoy us like midgets. But all this no by the face, of course of the horse: if you want fish, wet your ass. You can enter here making a question or giving some answer intelligent and paying goose paste, upon all paying. I try for people as ready as hunger and with paste. Warning: I dont want salamis nor much minus geeks on my net.

Wait for you.

RED@WEBO.

(Hola a todos los colegas de la Entrered. Aquí RED@WEBO.com.o.bien, desde Galicia. Pretendo que este solar esté en un futuro hasta la bandera. Necesito enlaces para mi página. También haremos tertulias y nos divertiremos como enanos. Pero todo esto no será por la cara, naturaca de la vaca: el que quiera peces que se moje el culo. Aquí se entra haciendo una pregunta o dando una respuesta inteligente y pagando pasta gansa, sobre todo pagando. Busco a personas más listas que el hambre y con pasta. Aviso: no quiero chorizos y mucho menos colgaos en mi red. Os espero. RED@WEBO).

A las pocas horas ya tenía algunos emilios interesándose por su página.

Cuando llegó a cien emilios puso un mensaje críptico. Él quería, ya lo avisó, gente inteligente, y necesitaba poder tener confianza en los futuros clientes. Su idea era muy sencilla: él empezaba haciendo una pregunta, le enviaban respuestas y luego él las vendía.

Además de ser un vicioso del software era un manitas del hardware y llevaba mucho tiempo detrás de poder terminar un nuevo tipo de micro chip que él iba a bautizar como Berberechip, en homenaje a su tierra y por la forma, copiada de este molusco.

Le faltaba un punto de información y necesitaba justo un pequeño empujoncito. Esta fue su petición para lograrlo:

—«To read manuals about computers without the hardware is so frustrative like to read manuals about sex without the software». Arthur C. Clarke.

I’m according with Arthur. I need some information to make a revolutionary MICROPOTATOE. I need some alpha-numerical conection. ¡AYUDA!

:–O.

[«Leer manuales sobre informática sin el hardware es tan frustrante como leer manuales sobre sexo sin el software».

Estoy de acuerdo con Arturo. Necesito alguna información para hacer una MICROPATATA revolucionaria. Me falta una conexión alfanumérica. HELP!:–O (Este dibujito es un emoticón o smiley y quiere decir «fumando espero».)]

Los links de conexión eran las palabras HELP y MICROPATATA. Lo más críptico era que había puesto MICROPATATA en lugar de microchip.

A las pocas horas ya tenía contestación. Alguien se había interesado y le envió una larga y documentada respuesta. Lo que más le emocionó a Red fue que hubiesen interpretado lo de MICROPATATA. La respuesta le llegó desde Holanda. Un personaje anónimo le daba todos los datos y se despedía diciendo:

—You are a monster, Red!

;) (Este emoticón significa estar muy sonriente y guiñar un ojo).

A las pocas semanas en la página de Red ya estaba a la venta el Beberechip. Fue todo un éxito. Consiguió una subvención de la Xunta y en poco tiempo Red logró que se vendieran tantos berberechos como Berberechips.

—Ya que medio mundo no conoce los berberechos por lo menos que conozcan los berberechips —decía él.

A los pocos días recibió una entrada en su página. Alguien pedía el siguiente dato:

—Here Guille Puertas:

No more Wombat! I need a special offer for the defense of a new net. You know something about, little };–) ?

[No más Wombat (Waste of money, brains and time —pérdida de dinero, cerebro y tiempo—). Necesito una oferta especial para defender una nueva red. ¿Sabes algo pequeño };–)? (Este emoticón significa diablillo).]

¿Guille Puertas? ¿Pero quién será Guille Puertas?, pensó Red. Y es que Red era muy joven para saber con quién se estaba jugando los cuartos. Él, el mismísimo Guille, un magnate de la informática, le pedía ayuda para crear una defensa en la red.

Red le contestó:

—Hello, Bill!:

I have something 4U. But it coast a Congo. Have you sea fabric?

(Hola, Bill: Tengo algo para ti. Pero cuesta un Congo. ¿Tienes tela marinera?)

No sabía Red a quién se lo estaba diciendo. Guille no tardó en responderle:

—Who are you? I can’t to count all my money. You don’t know me?

=0

[¿Tú quién eres? No puedo contar todo mi dinero. ¿No me conoces? =0 (Emoticón de asombro).]

La respuesta de Red no se hizo esperar, Guille le había ingresado un pastón en su cuenta.

—Money is the master key for all the gates, Bill.

I am a young from Galicia, land of funfair octopus. You say you can’t count your money? Then I say: let the orujo, little colleague! You must paint a lot, Bill. Well, I have a solution. It is sucked: some time ago, we have in Spain the serene man with pikes, you know, night watchman? Well, if you want I can create the Serenet. And the pike? It is sung: Viruses, viruses, and viruses. If some one tray to enter in your secret pages… zass!, the Serenet send a cup of viruses and so make the plane, make the lollypop. Bye.

Red

^-^

[El dinero es la llave maestra de todas las puertas, Guille. Soy un joven de Galicia, tierra del pulpo a feira. ¿Dices que no puedes contar todo tu dinero? Entonces yo te digo: ¡deja el orujo, coleguita! Tú debes pintar mucho, Guille. Bueno, tengo una solución. Está chupao: hace tiempo, teníamos en España el sereno con chuzo, ¿conoces los vigilantes de noche? Bien, si quieres puedo crear el Serenet. ¿Y el chuzo? Está cantao: virus, virus, y virus. Si alguien intenta entrar en tus páginas secretas… ¡zas!, el Serenet manda un golpe de virus y así hace el avión, hace la pirula. Adiós. Red. ^-^ (Emoticón de sonrisa de pillo)]

Pasaron muchas más preguntas y respuestas. Trabajó para la Xunta y arregló toda su red informática.

Red se estaba forrando con los Berberechips y con los Serenets. Se estaba convirtiendo en un wizard, en uno de los net.gods más conocidos.

Guille Puertas le lloraba, :_(

A Guille Puertas se le caía la baba, :-)~

Quería comprarle todo, pero él ya no se vendía a nadie. Creó y creó; creó cientos de páginas.

Creó el Cyber Funfair Octopus (Cyber Pulpo a Feira), un nuevo concepto de servidor con muchas ramificaciones divertidas.

—La gente quiere divertirse, ¡qué carallo! —decía.

Creó MariscosenlaRed.X@@.com.es, una página Webo de distribución de marisco por la Entrered. Creó Sinapsis.Galega.com.leite; el cyber café, con leche, que concentra a mayor número de people.

Creó Fractal&tal.el.caos.to.tal.es; una página webo para explicar el funcionamiento de la Administración Española.

Creó una nueva unidad de memoria: la Meiga, muy superior al mega, mucho más de 10 000 Gygas y también el Gygaiteiro, la repera de memoria.

Creó la Línea Queimada, un nuevo concepto de linea caliente.

Creó muchas páginas más.

Catapultó al doctor Bolinga a su regreso a Galicia, cuando fue expulsado de Quatar (al final se enteraron los emires). Este dejó de ser E.MIR y se convirtió en Computín.@cyber-medico.es.

Finalmente creó un nuevo concepto de centro de información. Hasta ahora se hablaba de portales. Red creo O Pazo: un portal a lo bestia.

Lo que había comenzado como un pequeño juego terminó convirtiéndose en una gran empresa.

Los Primitivos volvían a pitar. ¿Vender el pazo?: nor flowers! (¡ni flores!) ¿El Gordo?: the life father (la vida padre).

Los Primitivos se volvían a anunciar en la tele y en la Entrered. Esta vez no se anunciaban redes de pesca. Esta vez se anunciaba un producto genuino de Galicia: RED@WEBO O PAZO. Ya era hora de hacer justicia, ¡home!

Red se hizo famoso en todos lados, ya se ve que no fue por casualidad. Finalmente creó lo que tanto tiempo llevaban esperando miles y miles de gallegos esparcidos por todo el orbe: La Galicia Virtual.

Todo el mundo, desde Rapuchistán hasta Pindolerele, pasando por Tambarutiti y Yuyulibati, sabía quién era Red, conocían RED@WEBO, O PAZO y por supuesto, conocían Galicia.

Cuando se quisieron dar cuenta todos los que conectaron con él vivían La Galicia Virtual, todos eran gallegos.

—Aquí todos se sienten ben. Ven, te sentirás como en casa ¡Home! —decía Red en uno de los anuncios de su empresa en la tele.

El anuncio de la Entrered era más corto: Jirolsfilgud.com.u.filaik.at. home.¡casa!.RED@WEBO.OPAZO.es

Y Red tenía razón, ¡qué carallo!