Palabras moribundas

ueremos rescatar del olvido la palabra…

Rufián. Quizá del italiano ruffiano, y este derive del latín rufus (‘pelirrojo’, ‘rubio’), por alusión a la costumbre de las meretrices romanas de adornarse con pelucas rubias. También ‘hombre que hace el infame tráfico de mujeres públicas’, como ‘hombre sin honor, perverso, despreciable’.

¡Menudo rufián está hecho!