FABES BLANQUES CON LIEBRE

INGREDIENTES

Una liebre de un kilo a dos de peso.—Una cebolla grande.—Seiscientos gramos de fabes de la granja.—Un vaso (de los de vino) de vino blanco.—Tres dientes de ajo.—Dos tomates del tiempo, o en conserva.—Media hoja de laurel.—Tomillo.—Dos cucharadas de vinagre.—Guindilla.—Aceite.—Sal.

PREPARACIÓN

La noche antes de preparar la liebre, se limpia con un paño, se corta en trozos y se pone en la cacerola (que debe ser amplia) donde se va a guisar; se sazona con los ajos machacados en el mortero y la mitad del vino, se revuelve y se deja, tapada, toda la noche.

Se ponen les fabes en remojo.

A la mañana siguiente se sazona la libre de sal y se le añade, todo en crudo: la cebolla picada, el laurel, los tomates pelados sin semillas y cortados en trocitos, una pizca de tomillo y un poco de guindilla (si se quiere); se rocía con el vino, el vinagre y unas diez cucharadas de aceite crudo; se acerca al fuego y, cuando empieza a hervir se reduce éste y se cuece, lentamente, hasta que esté tierno, aproximadamente dos horas (el tiempo depende de la calidad de la liebre).

Les fabes se escurren y se ponen en una olla; se cubren con agua fría (sin sal), se acercan al fuego y, cuando rompe el hervor se baja éste y se cuecen, lentamente, hasta que estén tiernas. Para que no se deshagan, se tendrán, siempre cubiertas de agua (sólo cubiertas). Se agrega, cuando se vayan secando, agua fría en pequeñas cantidades. Si están cocidas antes que la liebre, se separan a un lado y se reservan.

Tierna la liebre, se agregan les fabes, se sacude la cacerola para mezclarlo y se deja cocer, todo junto, una hora más. Se comprueba de sal y se rectifica si hace falta.

Se sirve, todo junto, caliente.