Tanto el autor de estas Memorias como estas Memorias mismas son, naturalmente, novelescos. No obstante, individuos tales como el autor de estas Memorias no sólo pueden existir en nuestra sociedad, sino que por fuerza deben existir, si se consideran las circunstancias bajo las que, por lo general, esta sociedad nuestra se desenvuelve. He querido presentar ante el público, más claramente que de costumbre, uno de 1os personajes de nuestro reciente pasado. Representa a una generación que todavía vive entre nosotros. En el fragmento que se titula «El subsuelo», este personaje se presenta a sí mismo, expone sus puntos de vista e intenta, como puede, aclarar las razones por las que surgió y no tenía más remedio que surgir en nuestro ambiente. En el fragmento siguiente vienen ya las verdaderas «memorias», y en ellas refiere algunos acontecimientos de su vida.
Fiodor Dostoievski
Memorias del subsuelo
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Uno de los mayores errores que cometen las personas es creer que las buenas maneras son sólo expresión de ideas felices. Hay toda una gama de comportamientos que pueden expresarse con buenas maneras. De esto se ocupa la civilización: de hacer las cosas con buenas maneras y no del modo opuesto. Uno de nuestros errores fue el movimiento naturalista roussoniano de los años sesenta, cuando la gente decía: «¿Por qué no puedo decir lo que se me pasa por la cabeza?» En la civilización debe haber ciertas restricciones. Si todos siguiéramos nuestros impulsos sin cortapisas nos mataríamos los unos a los otros.
Judith Martin
Miss Buenas Maneras
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Y mientras las cosas se caían a pedazos,
Nadie prestaba mucha atención.
Talking Heads