Hasta la segunda guerra mundial vivía en Holanda una comunidad judía grande y próspera. La mayor parte pereció en el Holocausto. Aquellos que se salvaron sobrevivieron gracias a la resistencia holandesa y a algunas buenas personas que, por motivos religiosos y de conciencia, decidieron arriesgar sus vidas para salvar las vidas de otros.
Este libro está dedicado a Vonnet y al doctor Henry Kohly, a Alice y al doctor Harry Cooymans, a los verdaderos héroes de las guerras: las personas que salvan vidas.
Este libro se publica con la ayuda de Robert de Rothschild, amigo sincero de Yad Layeled, Bet Lojamei Haguetaot.