Agradecimientos

Las siguientes personas me han ayudado enormemente durante el largo proceso de revisión de la novela:

En primer lugar mis padres, José Manuel y Milagros, siempre los primeros en devolverme las diversas versiones del texto repletas de anotaciones en rojo. A continuación, y por orden alfabético: Jesús Álvarez-Miranda, Carmen Blanco, Olga Chicot, Lara Díaz, Arturo Esteban, Natalia García de Soto, Paco González, Javier Garrido, Máximo Garrido, Julián Lirio, María Maestro, Antonio Martín, Carlos Pérez-Benayas, Fernando Rossique, Cynthia Torres y Tatiana Zaragoza.

El Asesinato de Pitágoras sería un libro de calidad muy inferior si no fuera por todos ellos.

Por último, quiero dar las gracias a mi hija Lucía, por iluminar cada uno de mis días con su cariño y bondad inagotables.