Comentario sobre el texto D de la Ainulindalë

Veremos que este texto, que sólo en parte puede considerarse una nueva versión, no amplía, contradice ni clarifica la «nueva cosmología» en ningún aspecto; es decir, el texto D original. El cambio en §24 de «bajaron a las Estancias de Aman» por «bajaron a los campos de Arda» sólo hace que ese pasaje particular resulte más coherente: Arda estaba establecida para entonces, y es al conflicto de Arda adonde fueron esos otros espíritus. El cambio en §23 de «en medio de las vastas estancias del Mundo» por «en medio de las vastas estancias de Aman» presumiblemente no sea significativo, ya que es obvio que uno equivale al otro (véase p. 40).

No obstante, en las adiciones y correcciones del texto se introduce un nuevo elemento: Ea. Esta fue la palabra que pronunció Ilúvatar en el momento de la Creación del Mundo: «¡Ea! ¡Qué Sean estas cosas!»; y los Ainur supieron que «Ilúvatar había hecho algo nuevo, Ea, el Mundo que Es» (§20). En §23, donde las palabras de C «las vastas estancias del Mundo» habían pasado a ser en D «las vastas estancias de Aman», «Aman» fue sustituido por «Ea». El hecho de que en §15 no se cambiara «las Estancias de Aman» por «las Estancias de Ea» fue obviamente un descuido. El significado posterior de «Aman», el Reino Bendecido, aparece en una adición del texto en §32.

No cabe duda de que Ea, la Palabra de la Creación que corresponde también al Mundo Creado, tiene aquí el antiguo significado de Aman; el «Ser» implícito en la palabra que se originó fue el «nuevo Mundo… un globo en el vacío» que los Ainur habían contemplado en la Visión (§11), y que ahora veían como una luz lejana, «como si fuera una nube con un viviente corazón en llamas» (§20), y a donde bajaron aquellos que lo deseaban.

Sin embargo, se dice explícitamente que los Ainur, creados por Ilúvatar (§1), moraban en las «hermosas regiones» que Ilúvatar había hecho para ellos (§10); algunos de ellos se quedaron «más allá de los confines del Mundo» (§21), y Tulkas oyó «en el rielo lejano» de la [52] Guerra en Arda. ¿Por qué entonces la palabra Ëa se define en la lista de «cambios de 1951» (p. 18) como «Universo de lo que Es»? Es evidente que esta expresión no equivale a «el Mundo que Es» (§20). ¿Acaso el «Universo de lo que Es» no debe contener «Ea, el Mundo», y a los Ainur que contemplaron su creación?

Otros puntos que surgen de las diferencias entre C y D, y de las correcciones realizadas en D, se mencionan con los párrafos en que aparecen.

§31La omisión de las palabras «de los Noldor» tras «maestros de tradición» se debe probablemente a que se dice expresamente que Pengolod es un noldo: cf. §36, donde D dice «a quien nosotros los Noldor llamamos Elbereth».

En la parte posterior de este párrafo, sustancialmente revisada (p. 45; texto C p. 29), los nombres de las Lámparas cambian otra vez, de Foros y Hyaras a Forontë y Hyarantë; y en una corrección temprana alcanzan al fin las formas definitivas Illuin y Ormal (que aparecen en la lista «cambios de 1951», pp. 17-18). Ahora es específicamente Yavanna quien plantó las semillas en la Tierra Media, y Aulë quien hizo las Lámparas; no obstante, esto se dijo tanto en los anteriores como en los posteriores Anales de Valinor (IV. 306-307, V. 130), y de hecho se remonta a la Música de los Ainur original (I. 88-89).

En la corrección del pasaje sobre el primer crecimiento en Arda bajo la luz de las Lámparas la narrativa retoma la antigua tradición concerniente a las primeras flores (aunque ya han aparecido «hierbas»); véanse pp. 34-35 nota 17.

«Almaren en el Gran Lago», como en la lista de 1951 (p. 18), sustituye ahora a «Almar en un gran lago».

§32Aman, en una adición al manuscrito, adquiere ahora su significado posterior. El relato de cuando los Valar atacan a Melkor desde Valinor se amplía ligeramente en D: llegaron «con una gran hueste», y Melkor «permaneció oculto hasta que hubieron partido», luego «volvió a su morada en el Norte», donde construyó Utumno.

§36El cambio tardío de «ella fue quien hizo las Estrellas» por «ella fue quien hizo las Grandes Estrellas» es notable: probablemente signifique que Varda sólo hizo las Grandes Estrellas. Véase p. 428 y nota 285.

§34(p. 48; pasaje ausente en este párrafo en C). El nombre Rombaras [53] para el Cuerno de Oromë sólo se encuentra aquí; el nombre que lo sustituye en la revisión del pasaje, Valaróma, aparece en la lista de 1951 (p. 18).

D fue la última versión de la Ainulindalë. Hubo una copia a máquina, pero se trata de un texto amanuense sin significación alguna, excepto por unas pocas notas que mi padre apuntó en él. El texto se basó en D, después de que se hubieran hecho la mayoría de las correcciones, pero no todas. En la parte superior de la primera página escribió a lápiz la siguiente nota (que por desgracia no es completamente legible):

El Mundo debería equivaler a Arda (el reino) = nuestro planeta. Creación el Universo (. . . universo) debería ser Ea, lo Que Es.

Aquí surge de nuevo, y de nuevo de modo poco convincente, la cuestión planteada en pp. 51-52. De la nota se desprende al menos que «el Mundo» ha dejado de ser «nuevo Mundo… un globo en el vacío» que vieron los Ainur (§11), sino que ha de aplicarse a Arda; se trata por supuesto de un retomo, en lo que a la palabra se refiere, a la fase del Ambarkanta, donde Ilu (Arda) es «el Mundo» (véase p. 40). Pero el problema de definir Ëa como el «Universo de lo que Es» en la lista de 1951, o como «Creación el Universo» en la presente nota, sigue sin resolverse; es decir, sigue sin resolverse si la concepción de un «Mundo que es un globo en el vacío» y está separado del Vacío seguía vigente. De hecho, parece más bien que mi padre estuviera pensando en términos diferentes: Arda, el Mundo, estaba situada en una inmensidad indefinida donde toda la «Creación» está comprendida; pero no hay manera de saber cuándo escribió esta nota. Para más comentarios sobre esto véanse pp. 80-81.

Otra nota escrita a lápiz en la primera página de la copia mecanografiada dice: «Ilúvatar Padre de Todo (ilúve “el todo”)»; cf. las Etimologías (V. 418): raíz IL «todo», ILU «universo», quenya ilu, ilúve; Ilúvatar. Sobre la etimología original de Ilúvatar («Padre del Cielo») véase I. 312.

En la página del título de la copia mecanografiada mi padre escribió: «Atani (Segundos) Seguidores = Hombres». Atani (que aparece en la lista de cambios de 1951) no se encuentra en Ainulindalë C, pero sí en D (página del título y §38).