HALLÁNDOSE cortejando
cierto fraile a una monjita,
mientras que la requebraba
le enseñaba su pi…
su pipa con que fumaba.
La monja, como era lega
y profesaba al otoño,
rabiaba por darle entrada
y le enseñaba su co…
su copo con que ella hilaba.
El fraile, como enojado,
la dijo con disimulo:
—No fuera malito, hermana,
soplárselo junto al cu…
al cubo que saca el agua.
La monja, como agraviada,
le dijo sin agasajo:
—Váyase el fraile a la mierda
que le cortase el cara…
el caracolito que rabia.