No sabemos si algún día será posible viajar en el tiempo, pero no es algo paradójico. Al viajar al pasado conservamos nuestra libertad habitual de acción, pero, en general, acabamos en el pasado de un universo diferente. El estudio del viaje en el tiempo es una disciplina teorética en la que las cuatro vías principales tienen significación por igual: la mecánica cuántica, gracias a sus universos paralelos y su concepto cuántico del tiempo; la teoría de la calculabilidad, a causa de las conexiones entre realidad virtual y viaje en el tiempo, y porque las características distintivas del viaje en el tiempo pueden ser analizadas como nuevas modalidades de cálculo; en cuanto a la epistemología y la teoría de la evolución, su significación estriba en las limitaciones que imponen en los modos de adquirir el conocimiento.
No sólo están relacionadas las cuatro vías como parte de la estructura de la realidad, sino que se dan también notables paralelismos entre los cuatro campos de conocimiento como tales. Las cuatro teorías básicas gozan del poco habitual status de ser a un mismo tiempo aceptadas y rechazadas, utilizadas y no creídas por la mayor por la mayor parte de quienes trabajan en dichos campos.