ENCUENTRO DOS
Tunguska, Siberia, 1908

El iceberg cósmico penetró en la dirección del Sol, de modo que nadie lo vio acercarse hasta que el cielo estalló. Segundos después, la onda de choque aplastó dos mil kilómetros cuadrados de bosques de pinos, y el ruido más potente desde la erupción de Krakatoa empezó a dar la vuelta al mundo.

De haberse retrasado apenas dos horas en su viaje casi eterno, el estallido, de una potencia de diez megatones, habría arrasado Moscú y cambiado el curso de la historia.

El suceso tuvo lugar el 30 de junio de 1908.