MÁXIMA 9
Del necesario silencio del rico y del dichoso destino de quien no tiene hijos

(161) Si trabajas, y si el crecimiento se efectúa (correctamente) en el campo,
(162) (porque) Dios lo pone en abundancia en tu mano,
(165) no te llenes la boca delante de tus vecinos[88],
(166) pues se experimenta un gran respeto por el silencioso.
(167) Si un hombre de carácter[89] es poseedor de bienes,
(168) realiza el acto de poseer como un cocodrilo, (incluso) en la corte de justicia[90].
(169) No plantees reclamación [91]contra quien carece de hijos,
(170) no critiques [92] (el hecho de no tenerlos), y no presumas (por el hecho de tenerlos);
(171) hay muchos padres en aflicción[93],
(172) igual que muchas madres que han dado a luz, mientras que otra (sin hijos) está más serena que ella.
(173) Al que está solo es a quien Dios permite la mutación[94],
(174) mientras que el dueño de un clan familiar ruega (con ansiedad) que se tome su puesto[95].