Notas

[1] Zur wahren Eintracht. A menudo se traduce como: La Verdadera Concordia. <<

[2] Joseph Kieninger. <<

[3] Ludwig Batthiany-Strattman. <<

[4] K. 464, en la mayor. K es la abreviatura de Köchel. El caballero Ludwig von Köchel (1800-1877) fue el primero que intentó establecer un catálogo completo de las obras de Mozart. <<

[5] En Mozart, l’homme et l’oeuvre, París, 1954, p. 104, Alfred Einstein afirma: «Toda su producción está empapada de su sentimiento masónico; muchas de sus obras, y no sólo La flauta mágica, son masónicas sin que el no iniciado lo sospeche.» Y Jean-Victor Hocquard, Mozart, París, 1994, pp. 15-16, confirma: «Mozart fue ayudado en su Búsqueda de lo verdadero por la religión y, más aún, por la francmasonería a partir de su iniciación en diciembre de 1784, fecha capital en su evolución. Es insuficiente decir que aquello tuvo repercusiones en su inspiración musical: era la sede central de su pensamiento.» Habiéndose convertido la iniciación, efectivamente, en el centro del pensamiento y de la creación mozartianos, todas las obras importantes futuras estarán impregnadas de ella. Por eso las interpretamos a la luz de las enseñanzas iniciáticas, especialmente las óperas, concebidas como verdaderos rituales. <<

[6] Seguimos el análisis de Philippe A. Autexier, La Lyre maçonne, pp. 185 y ss., y 256 y ss. <<

[7] Fecha de la iniciación de Mozart en la Maestría, según Philippe A. Autexier. <<

[8] Vincenz Canarisi y un hermano no identificado, según el mismo autor. <<

[9] Citado de acuerdo con los trabajos de la logia Villard de Honnecourt, n.º 4, 2.ª serie, 1982, p. 157. <<

[10] Die Tugend, un término complejo que no se limita a la virtud moral, sino que incluye el rigor y la rectitud del ser que emprende un camino espiritual. <<

[11] Nos inspiramos en las revelaciones de Gérard de Nerval, que, en Viaje al Oriente, reveló ciertos episodios del ritual de Maestría. <<

[12] La naturaleza de las herramientas mortíferas varía según las versiones del mito. <<

[13] Hemos evocado en El gran secreto, tomo IV de los Misterios de Osiris, el ritual que está en origen del grado de Maestro Francmasón. <<

[14] K. 465, en do mayor. <<

[15] Un manuscrito que se conserva en una colección particular eslovaca relata ese importante acontecimiento (véase Philippe A. Autexier, La Lyre maçonne, p. 119). <<

[16] Un florín = algo menos de dos euros. <<

[17] K. 387, 421 y 428. <<

[18] N.º 20 en re menor, K. 466. <<

[19] La Mehlgrube. <<

[20] Joseph Packey, profesor de filosofía. <<

[21] Joseph Holzmeister. <<

[22] K. 456. <<

[23] Nombre que se daba a los conciertos. <<

[24] Sabiduría, Fuerza y Armonía (o Belleza). <<

[25] Sitio donde tuvo lugar un convento que vivió el fracaso de la Estricta Observancia templaría (véase nuestro tomo II, El Hijo de la Luz). <<

[26] Adam Weishaupt permaneció cuarenta y cinco años en Gotha, donde murió en 1830, a la edad de ochenta y dos años. <<

[27] N.º 21, K. 467. <<

[28] Algunos elementos se retomarán en la cantata masónica K. 471. <<

[29] K. 469. <<

[30] K. 427. <<

[31] Die Gesellenreise, K. 468. <<

[32] K. 470, obra que se ha perdido. <<

[33] Sinfonías de la 82 a la 87, llamadas «parisinas». <<

[34] K. 468. <<

[35] K. 471. <<

[36] Escrito por Franz Petran. <<

[37] Mozart retomará estos símbolos en La flauta mágica. Cuando aparece el Venerable Sarastro, conduce un carro tirado por leones. <<

[38] Ignaz Faber y Johann Lambert von Hanotte, que ejercía su ministerio en el principio de Lieja. <<

[39] K. 471. <<

[40] Como ha demostrado la historiadora Évelyne Lever, María Antonieta no encargó ni llevó ese collar, que arruinó su reputación. <<

[41] K. 471. <<

[42] 1726-1804. <<

[43] K. 472. <<

[44] K. 473. <<

[45] K. 474. <<

[46] K. 506. <<

[47] K. 475. <<

[48] K. 457, también en do menor, con fecha del 14 de octubre de 1784. <<

[49] El barón Von Kreitmayer. <<

[50] Das Veilchen, K. 476. A partir de esta fecha, Mozart ya no llevó de un modo muy preciso el catálogo de sus obras. <<

[51] «O heiliges Band», K. 148. <<

[52] Desgraciadamente, estas obras, como otras partituras destinadas a las logias, se han perdido o fueron destruidas. <<

[53] La Fidelidad. <<

[54] Esta situación duraría dos años. <<

[55] Obras que se han perdido (sobre poemas de Gottlieb Leon). <<

[56] K. 477, conocida con el nombre de «música fúnebre», pues durante mucho tiempo se creyó que había sido compuesta a la memoria de dos hermanos fallecidos. Nuestras propias investigaciones y las de Philippe A. Autexier han demostrado que la obra estuvo inicialmente destinada al ritual de Maestría y tuvo una primera versión para coro, antes de su última formulación, puramente orquestal, convertida, para las logias iniciáticas, en un elemento esencial del ascenso a la Maestría. <<

[57] K. 168 a 173. <<

[58] K. 465. <<

[59] «Mozart se extravía al querer innovar a toda costa» (Wiener Zeitung, enero de 1787). <<

[60] K. 477a, perdido. Cornet y Salieri participaron en esta hermosa obra. <<

[61] Georges de Saint-Foix (tomo II, pp. 312-313): «Lo que debe tenerse en cuenta de las conferencias secretas mantenidas entre Mozart y Da Ponte, a partir de otoño de 1785, es, al contrario de lo que suele creerse por lo general, la nueva prueba del interés y del cuidado que Mozart ponía en la elección de sus libretos. La completa refundición del de Beaumarchais por Lorenzo da Ponte es el resultado, primero, y muy probablemente, de las recomendaciones del emperador, que quería eliminar los peligros, sobre todo políticos, que siempre podían aparecer en la representación de una obra subversiva; pero esa refundición es, también, el resultado de los deseos expresados directamente por Mozart a su nuevo colaborador, y que no sólo modifican los detalles, sino también la psicología de cada uno de los personajes»; y Hermann Abert, Mozart, Leipzig, 1919: «Para Beaumarchais, la realidad consistía en el orden político y social de la Francia de entonces… La realidad de Mozart, por el contrario, engloba el contenido total de la vida». <<

[62] Georges de Saint-Foix (tomo II, pp. 410 y 416) había puesto de manifiesto ya el carácter iniciático de los personajes de Las bodas de Fígaro: «Gracias a la perspectiva del tiempo, comenzamos a entrever que se convirtieron en símbolos pertenecientes a otro orden de cosas… Son personajes “mozartianos”, susceptibles de experimentar todas las pasiones pero que tienen, todos ellos, esa altísima espiritualidad que nos hace sentir que no viven en absoluto en nuestro plano.» <<

[63] Los números pronunciados por Fígaro, «Cinco… diez… veinte… treinta… treinta y seis… cuarenta y tres», son en primer lugar expansiones del Cinco pero también, en desorden, una expresión cabalística de los números sagrados utilizados en los grados masónicos: 5 (Compañero); 10 para el 1; 20 para el 2; 30 para el 3 (Aprendiz); 36, es decir, 3 + 6 = 9, y 43, 4 + 3 = 7 (Maestría). Desde las primeras palabras de la ópera, al igual que el ritual de iniciación al primer grado, todo el camino queda revelado. <<

[64] Según el Zohar (comentario al Salmo 18-11), el iniciado monta en un querubín, vuela y planea sobre las alas de la verdad. <<

[65] Così fan tutte, «Eso hacen todas», canta Basilio, que da el título a la tercera ópera iniciática de Mozart. <<

[66] K. 457. <<

[67] Antón David y Vincent Springer. <<

[68] K. 479. <<

[69] O «alguna fuerza», noción que se relaciona con el Compañero-conde. <<

[70] El final más sorprendente de las cuatro óperas iniciáticas: 950 compases y seis escenas de las once que tiene el acto. <<

[71] Durante una Tenida, el Venerable Maestro utiliza un mazo. <<

[72] El duque Georg August von Mecklenburg-Strelitz, el 6 de noviembre, y el conde Franz Esterházy von Galantha, canciller de la corte de Hungría-Transilvania, el 7. <<

[73] K. 477. <<

[74] K. 479 y 480. <<

[75] Habrá que esperar a julio de 1787. <<

[76] Von Mecklenburg-Strelitz. <<

[77] K. 477. <<

[78] La segunda melodía de la condesa, Dove sono i bei momenti, prolonga y trasciende el Agnus Dei de la Misa de la coronación. Todos los comentaristas, incluso los que consideran Las bodas de Fígaro como una ópera bufa y una simple diversión, atribuyen un carácter «religioso», «espiritual», a las melodías que canta la condesa. <<

[79] Documento citado por Philippe A. Autexier, La Lyre maçonne, pp. 42-43. <<

[80] K. 481. <<

[81] Anton David y Vincent Springer. <<

[82] En ella se fundirían las logias La Esperanza Coronada, La Beneficencia y San José. <<

[83] Absorbía a los hermanos de las logias La Verdadera Unión, Las Tres Águilas, La Palmera y Los Tres Fuegos. <<

[84] N.º 22, en mi bemol mayor, K. 482. <<

[85] De J. B. van Schloissnigg o de A. V. von Schitttersberg. <<

[86] K. 483. <<

[87] Fa menor. <<

[88] Una acacia revela a los Maestros masones el emplazamiento de la tumba de Hiram. <<

[89] Véase, por ejemplo. El Zohar, el Libro del Esplendor, Ediciones Obelisco, 1996. <<

[90] Esta melodía —al igual que la de Marcelina, citada anteriormente— se omite con frecuencia, lo que arrebata a Las bodas de Fígaro uno de los aspectos fundamentales de la dimensión iniciática deseada por Mozart. <<

[91] Como Papageno en La flauta mágica. <<

[92] Al ver que se acerca a él la estatua del Comendador, don Juan dirá: «Nunca habría creído esto». <<

[93] Mozart utilizará de nuevo ese tema al final de La flauta mágicas durante la victoria de la Luz sobre las tinieblas, y en la cantata masónica K. 429, que probablemente data del mismo año. Semejantes detalles —y podríamos citar varios más— muestran hasta qué punto las cuatro óperas iniciáticas, Las bodas de Fígaro, Don Juan, Così fan tutte y La flauta mágica están unidas y forman un coherente plan de obra. <<

[94] K. 410, en fa mayor. <<

[95] K. 411 en si bemol mayor. En esta obra, que también puede ser tocada por dos clarinetes y tres cors de basset, se perfilan los temas del final de la sinfonía Júpiter y del «brindis» en canon, del segundo final de Così fan tutte. Una vez más, se adviene que la inspiración iniciática de Mozart impregna toda su obra. <<

[96] Habrá que esperar hasta noviembre de 1791 para que Mozart se exponga a escribir una obra destinada abiertamente a su cofradía. <<

[97] Der Schauspieldirektor, K. 486. <<

[98] El Venerable de La flauta mágica se llama Sarastro. <<

[99] N.º 23, K. 488. <<

[100] Johann Adam von Auersperg. <<

[101] K. 489 y 490. <<

[102] N.º 24 en do menor, K. 491. <<

[103] «Transformaba sus intenciones en nuestras almas», escribió el tenor irlandés O’Kelly. «Nunca olvidaré su rostro tan poco animado, que entonces parecía iluminado por los ardientes relámpagos del genio». <<

[104] El 4 de julio, añadirá: «Música singular: unas manos sin cabeza». <<

[105] K. 493. <<

[106] K. 494, que será, en 1788, el final de la sonata K. 533. <<

[107] K. 495. <<

[108] K. 471. <<

[109] K. 439b. <<

[110] K. 487. <<

[111] K. 497. <<

[112] K. 498, llamado «Trío de los bolos», que Mozart esbozó en casa de los Jacquin antes de perfeccionar la obra. <<

[113] K. 319, 338, 385 y 425. <<

[114] K. 451, 453,456, 459 y 488. <<

[115] K. 478, 481 y 496. <<

[116] K. 357. <<

[117] K. 499. <<

[118] K. 500. <<

[119] K. 319, 338 y 425. <<

[120] K. 451, 459 y 488. <<

[121] K. 501. <<

[122] K. 502. <<

123[] N.º 25 en do mayor, K. 503. <<

[124] K. 504, llamada «Praga». <<

[125] Ignoramos su raza. <<

[126] Ch’io mi scordi di te, K. 505. <<

[127] Padre desde hacía unos meses de Carl María von Weber, futuro compositor. <<

[128] «Liebes Bandel, wo is’s Bandel», K. 441. <<

[129] K. 504. <<

[130] «Non più andrai». <<

[131] Wollner y Bischoffswerder. <<

[132] K. 509. <<

[133] Mozart se equivocaba en este punto, pues el conde August Clemens Ludwig María von Hatzfeld tenía treinta y tres años de edad. <<

[134] K. 511, en la menor. <<

[135] Como indica Jean-Victor Hocquard, Le Don Giovanni de Mozart, p. 7, Da Ponte «estaba decidido a colaborar, como él mismo dijo, “mano a mano” con Mozart, pero permitía que le impusieran, en la dirección de la acción, escenas enteras». <<

[136] Desgraciadamente, destruido durante la segunda guerra mundial. <<

[137] K. 512 y 513. <<

[138] «Alcanzamos aquí un plano tal que no se trata ya, para nosotros, de describir personajes, sino más bien potencias del universo… El fin de Don Juan nos ha parecido siempre que revestía un alcance y un sentido cósmicos» (Saint-Foix, II, p. 512). «Ni uno solo de los caminos que llevan a la obra o que parten de ella desmiente lo siguiente: que la libertad sólo vale en la renuncia al poder, que el amor sólo vive de superar la posesión» (R. Stricker, Mozart et ses opéras, p. 264). <<

[139] Lepre, en italiano. <<

[140] O: «Desde hace dos años», es decir, desde su iniciación. <<

[141] Alusión al grado de Maestro vivido por el padre y el hijo. La censura obligaba a los francmasones a no ser demasiado explícitos en su correspondencia. <<

[142] K. 515, en do mayor. <<

[143] En la actualidad, 75-77. <<

[144] O. E. Deutsch, Mozart. Die Dokumente seines Lebens. <<

[145] K. 516. <<

[146] Die Alte, K. 517, en sí menor. <<

[147] «Sobald Damötas Chloen sieht», K, 518, en la mayor. <<

[148] «Die Engel Gottes weinen», K. 519, en fa menor, cuyo comienzo anuncia el trío de angustia de Pamina en La flauta mágica. <<

[149] K. 520, en do menor. <<

[150] K. 521. <<

[151] K. 453. <<

[152] K. 522. <<

[153] K. 523. <<

[154] K. 524. <<

[155] Según el musicólogo Johann Friedrich Rochlitz, quien, en 1815, relató esas confidencias sobre Mozart. <<

[156] K. 493. <<

[157] Nannerl se preocupaba tan poco por las obras de su hermano que varias de ellas se perdieron y otras fueron donadas al monasterio de Heiligkreuz, en Augsburgo. <<

[158] Serenata n.º 13 en sol mayor, K. 525. <<

[159] K. 526. <<

[160] Acto I n.º 11, «Fin ch’han, dal vino», «El aria del champán». <<

[161] Acto II, n.º 3, «Deh vieni alla finestra, o mio tesoro». <<

[162] Acto II, n.º 4, «Meta di voi qua vadano». <<

[163] El Cinco está encarnado por los adversarios —e iniciadores— del Compañero, Ana, Octavio, Elvira, Masetto y Zerlina. <<

[164] Sobre la autenticidad de estas palabras de Mozart, véase J. G. Prod’homme, Mozart raconté, p. 193. <<

[165] Sobre esta declaración, que confirma el carácter iniciático de Don Juan, véase Jean-Victor Hocquard, Mozart, 1994, p. 129. <<

[166] Don Giovanni, ossia «Il Dissoluto Punito», dramma giocoso in 2 atti, K. 527. <<

[167] K. 528. <<

[168] Des kleinen Friedrichs Geburtstag (El aniversario del pequeño Federico), dedicada al príncipe de Anhalt-Dessau, de nueve años, conocida como «Es war einmal», K. 529; Das Traumbild, K. 530. <<

[169] Innere Stadt, n.º 281. <<

[170] Die kleine Spimerin, K. 531. <<

[171] Theresia Constanzia Adelheid Friederike Maria Anna. <<

[172] K. 533. <<

[173] La partícula «de Nuevo» se suprimió muy pronto. <<

[174] K. 534. <<

[175] K. 535. <<

[176] K. 536. <<

[177] Donde se estrenó, en 1791, La flauta mágica <<

[178] Concierto n.º 26, en re mayor, K. 537, llamado «De la coronación», pues fue interpretado el 15 de octubre de 1790, en honor de la coronación de Leopoldo II. <<

[179] Auferstehung und Himmelfahrt Jesu. <<

[180] K. 539. <<

[181] «Ah, se in ciel, benigne stelle», K. 538. <<

[182] K. 540. <<

[183] K. 540a, n.º 11 de la partitura. Como ha observado Rémy Stricker (Mozart et ses opéras, p. 234), el aria de Octavio prevista para Praga, «id a consolar a mi amada y de sus hermosos ojos intentad secar las lágrimas Decidle que voy a vengar los agravios que ha sufrido, que sólo quiero regresar como anunciador de matanzas y muertes», tenía entonces un doble empleo. Hay que elegir, pues, la una o la otra «Si Octavio dice dos veces lo mismo con dos horas de intervalo, como si nada hubiera ocurrido, los tenores, los directores de orquesta y de los teatros de ópera son, hoy, los responsables de este estatismo, pero no don Octavio, ni el propio Mozart, que sabía, poco más o menos, lo que hacía». <<

[184] Mozart compuso el dúo K. 340b, que nada aporta a la partitura, y no figura en la mayoría de las grabaciones ni en las representaciones actuales. <<

[185] Los musicólogos han advertido que, en el manuscrito original de Praga, no existe interrupción alguna entre el sepultamiento de Don Juan y el regreso de los demás personajes. Técnicamente, observó el director de orquesta Bruno Walter, el grito en re menor de Don Juan produce el sol mayor del sexteto. Ese final se muestra pues como un conjunto coherente, y supondría no percibir nada del ritual y ceder a un romanticismo absurdo, del que Mozart estaba muy alejado, interrumpir la ópera en la muerte de don Juan. <<

[186] «Mi tradi quell’alma ingrata», una de las cumbres de la música de Mozart. <<

[187] K. 541, que pone en escena a un francés cínico intentando despabilar a un enamorado ingenio. Un esbozo del personaje se ve en el don Alfonso de Così fan tutte. <<

[188] Aunque ese hecho fundamental sea conocido y citado, especialmente por Geneviève Geffray y H. C. Robbins Landon, no se tiene bastante en cuenta para explicar las dificultades financieras de Mozart. <<

[189] Sinfonía n.º 39 en mi bemol mayor, K. 543. <<

[190] Minueto, alegreto-trío y final alegro. <<

[191] Hoy, en el n.º 16. <<

[192] K. 542. <<

193[] K. 545, llamada a menudo «Pequeña sonata para debutante», y que sólo los grandes maestros del piano pueden abordar sin desfigurarla. <<

[194] Sinfonía n.º 39, K. 543. <<

[195] K. 544, obra que se ha perdido, regalada a un amigo. <<

[196] K. 545. <<

[197] K. 546, en do menor. La fuga es transcripción de la escrita para dos pianos el 28 de diciembre de 1783 (K. 426). <<

[198] K. 547, la última que compuso para estos dos instrumentos. <<

[199] K. 548. <<

[200] K. 549. <<

[201] Sinfonía n.º 40 en sol menor, K. 550. <<

[202] Sinfonía n.º 41 en do mayor, llamada «Júpiter», K. 551. El manuscrito de esta obra maestra sólo tiene dos tachaduras. <<

[203] K. 552, canción para una voz con acompañamiento de teclado. <<

[204] K. 553 a 562. <<

[205] K. 498. <<

[206] K. 563, para violín, viola y violoncelo. <<

[207] K. 564, el último trío de Mozart. <<

[208] K. 565. <<

[209] Su verdadero nombre era María Magdalena. <<

[210] K. 567. <<

[211] K. 566. <<

[212] K. 568. <<