Dedico este libro a las personas más cercanas a mi corazón,
mis padres Lis y Elvio, sin ellos no sería la persona que soy hoy.
A mi hermano Anthony y a Joaquín.
A mis abuelos Betty, Héctor, Luli y Elvio.
Y a todas las personas que disfrutan de explorar mundos desconocidos y buscan un poco de fantasía en sus vidas.