Hacer la muestra

Del mismo modo en que tienes que dar pasitos de bebé antes de aprender a caminar, no puedes empezar tu prenda hasta que no hayas hecho un trozo de prueba. Así pues, haz unos cuantos puntos y compara tu trabajo con el modelo. Comprueba si la medida de tus puntos se corresponde con lo que tendrían que medir según el patrón escrito. (¡De otro modo no se ajustará bien lo que hagas!). Luego haces las modificaciones necesarias. ¿Demasiado tirante? Inténtalo con agujas más gruesas. Puede ser que tengas que hacer otro cambio u otra prueba antes de terminar… Tus puntos podrían cambiar a medida que vas adquiriendo experiencia. El misterio radica en que dos personas que utilicen agujas del mismo tipo y medida pueden hacer puntos de distinto tamaño y tensión. La magia consiste en que, aun con sus diferencias, ambas pueden crear algo igualmente maravilloso.