«Verdad dices, Sancho —respondió don Quijote—; pero ya te he dicho que hay muchas maneras de encantamentos, y podría ser que con el tiempo se hubiesen mudado de unos en otros y que agora se use que los encantados hagan todo lo que yo hago, aunque antes no lo hacían».
Del capítulo cuarenta y nueve de la primera parte de El Ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha, de Miguel de Cervantes