Yace desnudo en una cama, con las muñecas atadas, las piernas abiertas, los tobillos sujetos a las esquinas. Sábana a rayas, manta hecha un lío. En la primera foto, el pelo, largo, liso y negro, le cae sobre la cara y sólo deja ver una barbilla grasienta, que sobresale entre los mechones. Debe de tener trece años, catorce. Sus genitales parecen una piedra de forma rara. Lleva como corbata un largo trozo de soga.
Dos. Otro plano medio. El pelo se le curva bruscamente en cada sien, cae hacia atrás y se recoge sobre sus orejas como un telón de teatro al abrirse. Cara larga, nariz insolente. Ojos oscuros, vidriosos. Boca grande, demasiado abierta. Por lo demás, no ha cambiado, no creo. Las mismas piernas largas, los mismos pies grandes, levemente separados el uno del otro. La misma tosca corbata, brazaletes, ajorcas en los tobillos.
La tercera foto es un primer plano. Su cara, su cuello, su corbata, sus hombros, sus sobacos. Su lengua está aplastada dentro de la boca como una vela fundida. Sus ojos podrían ser los de una muñeca. Cada uno refleja la parte delantera de una cámara fotográfica. La corbata está demasiado apretada; la soga es de las que se usan para las anclas. Si no tuviera los ojos tan confusos, parecería que encuentra algo, o a alguien, muy divertido.
La cuarta es un plano medio. Está boca abajo, con las muñecas y los tobillos libres. Sus brazos están doblados en unas eles perfectas, simétricas. Tiene en el culo una mancha casi cuadrada, parecida a esas que tapan los actos sexuales en la pornografía dura, pero con los bordes más difuminados. Por contraste, su espalda, sus caderas y sus piernas son tan pálidas que no destacan. Lleva el pelo muy mal cortado. Tiene los hombros llenos de granos.
Cinco. Primer plano. La mancha, en realidad, es la boca de una cavidad poco profunda, como las que las olas hacen en las rompientes. El reborde desigual de la piel del culo es impecablemente liso. El interior de la cavidad es grisáceo, blando, parece carne picada. En el centro hay un pozo, o la entrada de un pequeño túnel, demasiado desenfocado para que sea posible explorarlo a simple vista, pero demasiado misterioso para no desear intentarlo.