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–Es un engaño. ¡Ataquen en formación y háganlo ahora! —ordenó Victon Ferrabrás a los líderes de Minotaurus. La llegada de un maestre enano, los cuales por lo común se mantenían neutrales en las decisiones políticas, y el hecho de que estuviera del lado de Arzallum, quería decir que había una maquinación muy bien trazada por Anisio Branford.
Los lanceros minotaurinos fueron puestos en formación cuadrada, listos para avanzar. Los arqueros tomaron posición. El rey Anisio Branford percibió que iban a tirarles, pero estaba demasiado lejos para dar instrucciones a sus capitanes. La capitana Bradamante y el capitán Gulliver también se hallaban apartados y mirando hacia Brobdingnag, y no tenían cómo dar órdenes al ejército que enfrentaba a los minotaurinos. Todavía no era ese el momento esperado por Anisio para que Minotaurus atacara con todo. Sin embargo, era un hecho que los arqueros ya armaban sus ballestas y que Minotaurus avanzaría.
Arzallum pagaría caro por eso.
Fue cuando…
—¡Formación de nube! ¡Formación de nube!
… surgió una voz en medio de los soldados vueltos hacia Minotaurus. La voz de un robusto coronel que asumía el mando perdido de manera vergonzosa.
—Coronel —dijo un sargento, intentando comprobar que escuchaba las órdenes correctas.
—¡Asumir postura de nube! ¡Ahora!
Las órdenes del coronel Baxter fueron dadas, y de una manera bonita de ver —al menos para los que consiguen hallar belleza en la guerra— los soldados se movieron como máquinas y asumieron una nueva formación en pleno campo de batalla, que una vez más tomó la ofensiva ante Minotaurus.
La formación de nube era difusa, cuya función principal era hacer lo opuesto a una pared de escudos: en vez de concentrar, diluir. En ese caso todos sabían que tenía sentido. Aquella era una forma de reducir el número de bajas que vendría con la temida lluvia de proyectiles de Minotaurus, apelando a la dispersión de los soldados y obligando al enemigo a buscar la confrontación directa, pues tal formación no era propicia para una represalia. Era un hecho: un ejército en el campo de batalla, con esa formación, evitaría algunas bajas en una lluvia de flechas, pero sería aniquilado si una ola de lanceros partiera en su dirección en formación cuadrada, con caballeros cubriendo sus flancos.
—Emperador —el responsable de los arqueros de Minotaurus pidió la orden.
—Lancen una ronda. Y que partan los lanceros.
Las flechas volaron al sonido de los gritos. Gritos tanto de los lanceros que corrían al encuentro de la matanza como de los arzallinos que levantaban sus escudos a la espera de escapar del torrente de flechas. Algunos escudos evitaron los proyectiles. Otros, de madera más floja, no. Algunas flechas entraron por ángulos difíciles de prever y acertaron a los hombres en los pies, en los hombros, en las caderas, en los cuellos, en las clavículas y en las nalgas.
Los gigantes de Brobdingnag habían cercado a maestre Ira y golpeaban, pateaban e intentaban aplastar al maldito y absurdamente gigantesco (obviamente no de altura, sino de masa muscular) enano que, la mayoría de las veces, regresaba aún más furioso, levantando gigantes con su destructivo martillo de guerra.
La capitana Bradamante al fin se acercó a la caballería, y el rey Branford dijo:
—¡Capitana, ve con el capitán Gulliver a liderar a los hombres contra Minotaurus!
—Rey Branford —insistió el capitán, para tener la certeza de que era su nombre el que estaba en aquella afirmación.
—Lleva a la capitana y lidera los carros de guerra —dijo el rey—. Si eso no da resultado, perderemos.
El capitán asintió y Bradamante, en dos movimientos, ya estaba en su grupa, cabalgando en dirección al ejército humano atacado por flechas. El rey Anisio Branford se volvió hacia su caballería y apuntó con la espada a los enemigos gigantes. Partió como un enloquecido, y su caballería lo hizo con él.
Entonces se aproximaron los carros de guerra traídos por medio de artefactos gnomos, creados como medio de transporte pero que el hombre ya estaba transformando en armas de guerra.
Al fondo comenzaba a amanecer. Pero el mundo todavía parecía oscuro.