75

Tú en mis pensamientos eres sustento y vida,

igual que agua de mayo en la naturaleza;

y por la paz que ofreces mantengo igual porfía

que aquella que un avaro libra por su riqueza:

ahora se envanece con su placer de rico

y al poco está temiendo que roben su tesoro;

ahora estar a solas contigo es lo que ansío,

y al poco, que el mundo admire lo que adoro;

a veces el banquete de verte ya me sacia,

otras, muero de hambre por mor de una mirada;

no tengo ni persigo delicias ni más gracias,

pues salvo lo que tienes y das no quiero nada.

Así día tras día, hambriento y satisfecho,

o bien todo me sacia o bien nada aprovecho.[75]