EL INTERIOR DE LA TIERRA,
EL MITO POLAR Y AGARTHA
Tintoretto, Descenso de Jesucristo al Limbo, 1568, Venecia, iglesia de San Cassiano.
¿Qué ocurre en el corazón de la Tierra? Toda la tradición antigua imagina que, si se penetra en las entrañas de la Tierra, se entra en el reino de los muertos. Así era el Hades en Homero o Virgilio, así era el infierno de Dante y el de muchas visiones del más allá anteriores a su obra capital, como el Libro de la escala y otros textos árabes que narraban la visita de Mahoma al infierno.
Así eran los Campos Elíseos donde moraban las almas de los justos, y también aquella sección del Hades donde Zeus había encerrado a los Titanes, el Tártaro, descrito como una sima tan profunda que si se dejara caer un yunque tardaría nueve días y nueve noches en tocar el fondo. Solo ha habido un autor que haya planteado la hipótesis de que el infierno no estaba bajo tierra sino en los cielos, y fue Tobias Swinden (1714) que, en sus investigaciones sobre la naturaleza y la ubicación del infierno, demostraba que este no podía estar en el centro de la Tierra sino en el punto más caliente del universo, esto es, en el centro del Sol.
Descenso de Mahoma al infierno acompañado del arcángel Gabriel, miniatura del manuscrito árabe Libro de la Ascensión, Turquía, siglo XV, París, Bibliothèque Nationale de France.