Libro primero

El así llamado «Imperio» de Malaz comenzó como una talasocracia. Es decir, gobierno gracias al poder en el mar. En la indecorosa lucha de los estudiosos por identificar y destilar las primeras etapas del imperio, se suele pasar por alto esta característica, que es la que de verdad lo define. Sin embargo, la expansión malazana fue, de forma innegable, la de una potencia marina y esa fue la clave de sus primeros éxitos. También fue la clave de uno de sus primeros fracasos: la irreflexiva incursión en el archipiélago y subcontinente conocido con los variados nombres de Puño, Korel o el Maldito por las Tormentas. Pues este archipiélago era, en sí mismo, una potencia marina suprema, aunque no expansionista. Y al final, por supuesto, fue el mar el que de forma tan definitiva e irreversible puso fin a todas las hostilidades.