[1] Soy algo cruel con los profesores universitarios, y es que me dan envidia, debo reconocerlo: aunque mi trabajo de ejecutiva es un chollo y está mejor pagado que el suyo, tiene menos glamour. En fin, aceptémoslo: algunos académicos, sobre todo los sociólogos, han producido estudios dignos de interés sobre la empresa privada. <<
[2] «Schmilblick» era un programa radiofónico muy famoso de la década de los setenta, que fue ridiculizado (y a la vez inmortalizado) por el humorista Coluche en un sketch del mismo nombre. La palabra schmilblick se emplea mucho en las empresas para evitar nombrar que se está haciendo cuando lo esencial es que esta tarea imprecisa avance. <<
[3] ¿Que a cuales? Vamos a sincerarnos: al psicoanálisis y a la escritura. Pero existen muchas otras actividades apasionantes (remuneradas o no, esa no es la cuestión): criar asnos, montar equipos de sonido ultramodernos, organizar fiestas, colaborar con una asociación, cultivar un viñedo, coleccionar fósiles, pintar, ligar en la playa… <<
[4] Sondeo realizado por IFOP para Gallup, citado en la revista Enjeux-Les Échos, nº 187, enero de 2003. <<
[5] Linguistrerie: neologismo de cosecha propia, inspirado en Jacques Lacan y creado a partir de una combinación de linguistique ('lingüistica’) y cuistrerie ('pedanteria’). <<
[6] Un bonito ejemplo de oxímoron, mi fórmula de estilo favorita, como verá más adelante el lector (véase «La cultura de empresa»). <<
[7] Alusión al poema «Inventario» de Prévert, donde cada estrofa termina con los versos: «Un raton— laveur», «deux ratons-laveurs»… ('un mapache’, 'dos mapaches’). (N. de la T.). <<
[8] Como fondo musical para un acontecimiento como este, propongo el siguiente himno: «¡Ah! Ca ira, ca ira, ca ira / Et le PDG on s’le paiera / Et si on s’le paie pas / On lui cassera la gueule / Et si on s’le paie pas / Sa gueule on lui cassera». [‘¡Ah! Saldrá bien, saldrá bien / Que se vayan al cuerno los jefes / ¡Ah! Saldrá bien saldrá bien / El presidente del Consejo se va a enterar / Y si no nos hace caso / Le romperemos la cara / Y si no nos hace caso / La cara le romperemos’]. Es una adaptación de una canción de Mayo del 68 titulada «La Grappignole», que a su vez se inspiraba en el himno revolucionario «La Grappignole». (Explicación: el decano de la Universidad de Nanterre, sede de numerosas protestas en aquellos tiempos agitados, se apellidaba Grappin). <<
[9] Autor de la obra L’Enterprise libérée [‘la empresa liberada’] (Duranod, 1993): ¡otro oxímoron! No hace falta decir que no recomendamos su lectura. <<
[10] No puedo negar que me encantan las canciones, y he hecho mío este himno citado por Georges Archier, Olivier Elissalt y Alain Setton en Mobiliser pour réussir, Éditions du Seuil, 1989: «Pour les cercles de qualité, fortement motivé tu seras / La méthode, tu respecteras / Le volontariat, tu favoriseras / Ton impatiance, tu maîtriseras / L’équipe, tu valoriseras / De leur travail, tu ne te mêleras / Ta confiance absolue, tu manifesteras / L’avarice, tu banniras / La vocation, tu susciteras». (‘Para entrar en los círculos de calidad, muy motivado estarás / El método respetarás / El voluntariado favorecerás / Tu impaciencia dominarás / El equipo valorarás / Con su trabajo no te meterás / Tu absoluta confianza le manifestarás / De la avaricia huirás / Y la vocación suscitarás’). <<
[11] ¡Se nota que por aquí ha pasado el Mayo del 68! La empresa lo aprovecha todo, incluso los asuntos que en cierto momento pudieron parecer liberadores frente a unos poderes y jerarquías esclerotizados. <<
[12] Recomiendo la lectura de mi anterior best-séller, Lacan suans peine Alain Stanké, 2002. <<
[13] Quarteron recuerda por su forma a doublon (‘doblete’) y tripon (‘triplete’), pero significa ‘cuarterón’ (medida de peso) y como término figurado y peyorativo, ‘pequeño número’, ‘puñado’. En este último sentido lo utilizó De Gaulle para denunciar el pronunciamiento militar de Argelia: «Un quarteron de généraux» (‘Un puñado de generales’). (N. de la T.). <<
[14] Enjeux-Les Échos, nº 189, marzo de 2003 <<