ADVERTENCIA PREVIA

TODA LA HISTORIOGRAFÍA y toda la novelística inglesa sobre la II Guerra Mundial presentan la contienda como un enfrentamiento entre Inglaterra y sus aliados contra Alemania y los suyos. En esa misma dinámica cayó la cinematografía estadounidense. De esa forma se obvió a otras fuerzas militares que participaron: australianas, neozelandesas, indias, canadienses, sudafricanas, griegas… Lo mismo ocurrió con la intervención de la Francia Libre. Ante esto, esos países tuvieron que reconstruir su historia mostrando al mundo su implicación en la lucha contra el nazismo y el fascismo. Cuando Francia reconstruyó la suya, también incurrió en un olvido: los soldados republicanos españoles enrolados en sus filas. Al final, ellos fueron los únicos en este conflicto bélico que lo dieron todo y no recibieron nada a cambio, ni las gracias. Pero no existe un terruño de África o Europa, testigo de esta guerra, sin jalonar por una tumba española.

Aunque todos y cada uno de los capítulos de esta novela están basados en hechos reales, es justo advertirle, querido lector, que, en la dialéctica Historia y narración, esta es la que impone el ritmo sobre la melodía de aquella.

Y como colofón a esta previa, cuando se adentren en las páginas posteriores, tengan siempre presentes las palabras de Max Aub sobre los héroes de esta gesta, que «… se hizo con hombres, no con semidioses. Con hombres de todos los días, no con soldados ilustres ni con pozos de ciencia militar ni estrategas de nombre ni tácticos sin par».