[93] La categórica prohibición de batirse en retirada no es ninguna novedad; el alto mando del ejército no ha dejado de insistir en ello desde la brecha abierta el 2 de mayo. No obstante, su efecto fue del todo contraproducente, obligando al ya muy presionado Tercer Ejército ruso a defender posiciones indefendibles, lo cual solo conllevó un incremento del ya muy elevado número de bajas. <<
[94] Es cierto que el enemigo consiguió cruzar el San en algunos puntos hacia mediados de mayo con la misma estentórea fuerza y seguridad con que lo hizo en Gorlice, pero ahora da la impresión de que estas incursiones se han estancado y detenido. <<
[95] Florence Farmborough no tiene claro si los cosacos simplemente cumplían órdenes o si este pillaje era más bien una iniciativa propia. Casi todo parece indicar que se trata de lo primero. Cuando el ejército ruso reanudó su retirada volvió a aplicar una vieja especialidad suya: lo que suele denominarse táctica de tierra quemada. Sistemáticamente se apoderaban del mayor número de bienes posible —sobre todo ganado—, además de destruir todo lo que, por distintas razones, no podían llevarse, sin considerar que esto condenaba a la población civil a grandes penurias e incluso al hambre. En estos momentos se encuentran en un territorio perteneciente al Imperio Austrohúngaro, lo cual también explica por qué se llevan a los hombres en edad militar, cosa que ya se había hecho antes durante la invasión de la Prusia Oriental alemana en 1914, aunque no con la misma estudiada planificación. (En esa ocasión, durante la retirada, los rusos entre hombres, mujeres y niños se llevaron a la fuerza a más de 10 000 alemanes). El pillaje y la quema organizados prosiguieron con igual intensidad una vez traspasada la frontera, de vuelta en territorio ruso, ocasionando indescriptibles sufrimientos a la propia población civil, algo que, obviamente, no fomentó la popularidad de la guerra entre la población rusa. <<
Fragmento 48
[96] La descripción es del propio Pollard. Quien haya escuchado cómo suena la artillería bélica sabrá que esta aproximación a los distintos tipos de sonidos no está nada mal: el «bang» ligeramente prolongado representa un disparo, el «swisch» se corresponde con las granadas que vuelan por encima de tu cabeza, y ese «crump» más corto y compacto reproduce el sonido de las granadas que estallan bastante cerca. <<
Fragmento 49
[97] De Nogales utiliza el término «nestoriano» al referirse a los sirios. <<
Fragmento 50
[98] Las expectativas puestas en Italia tras su incorporación a la guerra no han sido correspondidas. Por un lado, el avance excesivamente optimista del ejército italiano ha sido detenido casi de inmediato, en las infranqueables montañas que bordean las fronteras y cuya existencia parece haber cogido por sorpresa a algunos de los generales italianos más torpes. Por otro, la incursión italiana ha aportado una nueva motivación a la población eslava del Imperio Austrohúngaro, quienes aquí han hallado —a diferencia de en la guerra contra Rusia y Serbia— una causa por la que sí están dispuestos a morir. <<
Fragmento 51
[99] «Así está escrito en el plan de Dios, que de quien amamos tenemos que separarnos». <<
Fragmento 52
[100] Una aeronave con el depósito lleno puede superar los 300 kilómetros en un solo vuelo y, teóricamente, podría mantenerse varios días en el aire. El alcance de las naves especialmente equipadas se aproxima a la media vuelta al mundo. <<
Fragmento 55
[101] También podría ser sábado, 14 de agosto. <<
Fragmento 56
[102] La grandiosa escala de las distancias africanas se insinúa en el hecho de que desde que la unidad de Buchanan zarpara de Plymouth, Inglaterra, tardó cinco días en llegar a África, mientras que les tomó veinte días más navegar a lo largo de la costa africana para llegar a su destino, Mombasa, en el África del Este británica. <<
[103] Un ejemplo de lo que se temía fue la pequeña guerra civil que estalló entre los bóers de Sudáfrica en agosto de 1914: de un bando estaba el gobierno, que —pese a que solo habían transcurrido 12 años desde la guerra contra Gran Bretaña— decidió tomar partido por ellos, y del otro, una minoría militante que quería vengarse de los británicos aliándose con Alemania. Este conflicto interno se resolvió en febrero de 1915, cuando los últimos rebeldes germanófilos fueron vencidos y claudicaron. <<
Fragmento 59
[104] Arriba en Artois los franceses perdieron más de 100 000 hombres y los británicos alrededor de 26 000 a cambio de beneficios marginales: un par de kilómetros, nada más. El primer ataque británico, el del 9 de mayo en Neuve Chapelle, resultó totalmente fallido, lo que enseguida se achacó a una pésima preparación artillera: duró solo 40 minutos y se realizó casi exclusivamente con piezas ligeras y sin granadas explosivas, lo cual se consideró una grave desventaja. Éste fue el inicio del denominado «escándalo de las granadas» en Gran Bretaña, que no solo desembocó en sonoras protestas que exigían la dimisión del gobierno de Asquith, sino también en radicales transformaciones de la producción de municiones y, de hecho, de toda la economía bélica. Solo a causa de esta crisis abrió los ojos la población británica y comprendió los grandes esfuerzos que se requerirían para ganar la guerra. <<
[105] Hay un factor, sin embargo, que no puede solventarse por iniciativa propia: nos referimos al hecho de que los alemanes, a lo largo de casi todo el frente, mantienen posiciones en las crestas de las lomas y en los niveles más altos del terreno. Esto es así porque el frente occidental se estancó en el momento en que los alemanes decidieron interrumpir su repliegue (o su avance). Como es natural, se establecieron allí donde el terreno les resultaba más conveniente. Esta circunstancia otorga a los alemanes la ventaja de una mejor visibilidad; además, en los sitios en que las aguas freáticas están a un nivel alto, como en Flandes principalmente, los alemanes han podido cavar sus trincheras con más esmero y a más profundidad que los aliados, que se hallan atrapados en un terreno más llano. Estos problemas complican las operaciones de la Entente en prácticamente todas sus ofensivas. <<
[106] No se deben achacar tales ilusiones a una mera y singular falta de imaginación, más bien son la consecuencia de experiencias previas. La última guerra acaecida en Europa fue la franco-prusiana de 1870-1871. Sin duda, fue una guerra de desenlace rápido, lo cual demuestra lo engañosos que pueden llegar a ser los paralelos históricos. <<
[107] Las primeras estadísticas ponían de manifiesto que algo más del 13 por ciento de todas las lesiones de combate afectaban a la cabeza y que, de éstas, nada menos que el 57 por ciento eran mortales. Por tanto, las lesiones cefálicas eran ahora más frecuentes que en anteriores guerras. Lógicamente, al pasar los soldados la mayoría de su tiempo en las trincheras, la cabeza se convertía en la parte más expuesta de su anatomía. La usanza de cortarles el pelo al cero a los soldados se introdujo durante la Primera Guerra Mundial y no (cosa que a menudo se supone) como una manera de prevenir la aparición de parásitos; sino porque simplificaba y aceleraba la atención de las heridas en la cabeza. <<
Fragmento 60
[108] El término inglés es bombing platoon. <<
[109] El nombre se originó durante los combates de octubre de 1914, cuando unos soldados británicos que huían se concentraron en ese bosque y un mando local les dio órdenes de permanecer allí hasta nuevo aviso y no volver al combate sin su consentimiento (sanctuary significa también «asilo»). A estas alturas de la guerra el bosque es cualquier cosa menos un refugio, pero el nombre sigue bien arraigado. Cabe mencionar que en la actualidad existe en ese sitio un extravagante café donde por unas monedas te enseñan los restos vallados, y desesperadamente conservados, de unas trincheras, además de una colección increíble y cuantiosa de Bric-à-brac lleno de óxido del periodo 1914-1918. <<
Fragmento 63
[110] El ejército italiano ha perdido 68 000 hombres, 11 000 de los cuales resultaron muertos. Estas cifras, sin embargo, no se harán públicas hasta después de la guerra. <<
Fragmento 64
[111] Antes del fin de la guerra el 15 por ciento de la población serbia habrá muerto en los desplazamientos. Durante el periodo 1914-1918 ningún otro pueblo llega a padecer tantos sufrimientos como el serbio. <<
[112] Tanto el ejército alemán como el austrohúngaro han creado una cultura propia en lo que a guerrillas, francotiradores, komidatschi, francs-tireurs y demás variantes se refiere; es decir, hombres armados que disparan emboscados y pelean sin uniforme. Su renqueante razonamiento, influido por la experiencia colonial e histórica, es el siguiente: éste es un fenómeno completamente contrario a la civilización; pues en una guerra civilizada solo los hombres uniformados luchan entre sí, los civiles no deben inmiscuirse y, de hacerlo, deberán ser castigados con la máxima dureza: con la muerte. El implacable rigor de esta línea, que teóricamente se sigue en nombre de la civilización, unida a las desmesuradas exageraciones que circulan respecto a supuestos abusos cometidos contra soldados, han llevado a estos dos ejércitos a perpetuar las mayores masacres contra civiles que Europa haya visto en más de un siglo. Lo peor tuvo lugar durante la fase inicial de la guerra, en 1914 en Bélgica, donde más de mil civiles —hombres, mujeres y niños— fueron asesinados por tropas alemanas como represalia por imaginarios atentados guerrilleros, así como en Serbia, donde las tropas austrohúngaras (especialmente las húngaras) en repetidas ocasiones arrasaron salvajemente con todo y contra todos los que se cruzaron en su camino. Ahora la histeria de agosto de 1914 se ha apaciguado, pero ambos ejércitos continúan empleando su durísima línea contra todos aquellos que pelean sin ostentar los atributos del soldado regular. Los guerrilleros deben ser ahorcados. <<
Fragmento 65
[113] Referencia al motín a bordo del acorazado ruso Potemkin en 1905. No obstante, aquí le falla la memoria a Stumpf. Como sabemos, el Potemkin pertenecía a la flota del mar Negro y no a la del Báltico. <<
Fragmento 66
[114] Lo que sucedió es lo siguiente: Hacia finales de septiembre llegó en primer lugar la noticia de la movilización búlgara, clara señal de que el país, tras muchas vacilaciones y aún más zorrerías, al final se decantó por el bando de las Potencias Centrales; fue un suceso que, por supuesto, aterró a los griegos y les hizo poner a su pequeño ejército en marcha e incluso convocar a los aliados, motivo por el cual el cuerpo de ejército de Sarrail desembarcó en la ciudad que hoy en día se denomina Tesalónica. Ya al día siguiente llegó la noticia de que los búlgaros habían atacado a sus viejos enemigos serbios por la espalda invadiendo las regiones meridionales del país, al tiempo que alemanes y austríacos entraban por el norte; a esto le siguieron los relatos de la fría, o más bien hostil acogida que obtuvo el cuerpo de ejército de Sarrail debido a que el primer ministro que los había convocado acababa de ser destituido por el rey, de origen alemán y germanófilo. Acto seguido, Grecia viró el rumbo en política internacional y volvió a declararse neutral. (Desembarcar en Salónica significó por eso, para citar a A. J. P. Taylor, «un acto que a su manera era tan brutal como la invasión alemana de Bélgica»). A continuación sonaron unos breves clarines triunfales anunciando que el ejército de Sarrail estaba avanzando hacia el norte a lo largo del ferrocarril Salónica-Belgrado; fueron breves porque no tardó en llegarles la poco sorprendente noticia de que los serbios, al final, habían sucumbido a la supremacía de las Potencias Centrales y que los restos desperdigados de su ejército se encontraban ahora perdidos en algún lugar de las nevadas montañas albanesas, de camino hacia el sur. <<
Fragmento 68
[115] Los generales de ambos bandos detestaban este fenómeno. Obsérvese también que ciertos tipos de unidades militares, como las de guardias, eran inmunes al fenómeno, y que lo mismo es válido para ciertas nacionalidades cuando se encontraban, como es el caso de húngaros y serbios. <<
Fragmento 69
[116] La principal significación del petróleo no era como materia prima de la gasolina que propulsaba los aeroplanos y automóviles —todavía muy poco numerosos—, sino como combustible de la flota británica. El almirantazgo británico acababa de descubrir que el petróleo ofrecía una serie de ventajas en comparación con el carbón: una de ellas, que era mucho más fácil de transportar. <<
[117] Mousley no lo sabe en este momento, pero no volverá a ver estos objetos nunca más. <<
Fragmento 70
[118] Al día siguiente de que ocurriera esto se inició la evacuación de las fuerzas aliadas en Galípoli, y tuvo lugar la mayor victoria militar del Imperio Otomano en los tiempos modernos. <<
Fragmento 72
[119] Se hizo famoso antes de la guerra gracias a sus audaces, por no decir suicidas, piruetas en el aire. <<
[120] También es posible que fuera el 16 de diciembre. <<
Fragmento 77
[121] Un cheroot es una especie de cigarro largo y fino muy popular en la época, sobre todo entre los blancos que habitaban en los trópicos, ya que se creía que proporcionaba cierta protección contra las enfermedades tropicales. Un cheroot birmano solía contener un tabaco que tiraba a rubio. Cabe mencionar que la alternativa al cigarro que domina en nuestros días, el cigarrillo, se popularizó de forma generalizada justamente durante la Primera Guerra Mundial. Tanto el cigarro como el cigarrillo —y esa forma intermedia que es el cheroot— gozaban de evidentes ventajas frente a la pipa, ya que permitían a su consumidor tener las manos libres. <<
Fragmento 80
[122] Los altos mandos suelen estimular la práctica de este tipo de caza mayor, cuando no la ordenan directamente. Es un modo de mantener la tensión en un sector del frente que, de lo contrario, debido a la calma, se vería amenazado por la natural moderación de los soldados, algo que podría incluso llevar a la pura confraternización con el enemigo. <<
[123] Pocas semanas atrás, más de 400 000 hombres carecían de armas. <<
[124] Además, por esta época, nadie tiene una visión de conjunto en lo que a bajas se refiere, sobre todo debido a que el ejército ruso tiene fama de llevar muy mal las estadísticas de sus propias bajas, defecto que, por otro lado, heredaría el Ejército Rojo. <<
[125] Aquéllos que tienen buenos contactos saben también que las Fuerzas Aliadas —Gran Bretaña, Francia, Italia y Rusia— han decidido que en 1916 se comenzarán a realizar operaciones de ataque sincronizadas destinadas a poner trabas a las Potencias Centrales, las cuales gozan de una ventajosa posición geográfica que les permite transportar fácilmente tropas de reemplazo a los lugares amenazados. <<
Fragmento 84
[126] La palabra inglesa que King utiliza es dagos (derivado del nombre propio español Diego) término despectivo con que se hace referencia a personas procedentes de la región mediterránea, como españoles, griegos e italianos. Hoy en día, el equivalente (en España) podría ser «sudacas», pero eso convertiría a Olive King en una mujer más llena de prejuicios de los que en realidad tenía. Su actitud no se diferencia del común de los parlantes de la época. <<