[1] Lo cual es enteramente cierto: antes de que acabe el mes dos ejércitos rusos habrán penetrado en territorio alemán. <<
[2] «Estate tranquila Patria querida / firme y leal vigila el centinela del Rin», en traducción libre. Desde mediados del siglo XIX, Die Wacht am Rhein se consideraba el himno nacional no oficial de Alemania. <<
[3] «¡En casa, en casa nos volveremos a ver!». <<
Fragmento 3
[4] Tsingtao —cuya grafía actual es Qingdao— está situada en una península de la costa de la provincia de Shandong; la herencia alemana se detecta claramente en el hecho de que aquí se produce la mejor cerveza de China. Fue alquilada por Alemania desde finales del siglo XIX como compensación por el asesinato de unos misioneros alemanes. Japón, cuyas desenfrenadas ambiciones imperialistas en el continente asiático ya lo habían conducido a la guerra con Rusia y con China, siguió desarrollando mediante este acto sus planes expansionistas, si bien bajo pretexto de respetar la alianza pactada en 1902 con Gran Bretaña. Desde mediados de agosto, es decir, desde una semana antes de la proclamación del mencionado ultimátum, unidades de combate japonesas estuvieron listas para atacar Tsingtao. <<
[5] Botado en Kiel el año 1909, el SMS Helgoland encarna la carrera armamentística del periodo previo a la guerra: fue construido en respuesta directa al acorazado británico HMS Dreadnought, el mayor y más potente buque de guerra existente, que con sus turbinas a vapor, su blindaje y su pesado armamento hizo época y convirtió de la noche a la mañana en obsoletos los antiguos buques acorazados, consiguiendo que a los estrategas de las armadas de todo el mundo se les disparasen los presupuestos. El armamento del SMS Helgoland está a la altura del HMS Dreadnought y su blindaje llega a ser incluso algo más grueso. (Esto se debe a que los navíos de guerra alemanes no estaban pensados para tener el mismo alcance que los británicos, por lo que lo ahorrado en capacidad de almacenaje de carbón se invertía en protección). Con sus doce cañones de 305 mm es uno de los acorazados más modernos de la Imperial Flota de Alta Mar alemana, y junto con sus tres buques gemelos Ostfriesland, Thüringen y Oldenburg despertó grandes expectativas entre la población civil y los almirantes, la propia tripulación y el emperador Guillermo II. Todo el mundo sabe que la costosa (y absurda) Flota de Alta Mar fue uno de los proyectos favoritos del káiser. Fue precisamente su construcción la causante de que Alemania estuviera en camino de enfrentarse a Gran Bretaña antes de la guerra. <<
[6] Oh, Alemania mía, qué fuerte debes de ser, / qué honesta hasta en lo más profundo, / para que nadie se haya atrevido contra ti a solas / sino pidiendo ayuda a otros seis. / Alemania, cuán sincero no será tu corazón, / y cuán deslumbrantes y puras tus razones, / para que el más poderoso de los hipócritas te odie / y el inglés empalidezca de rabia. <<
[7] Da muerte al diablo y recoge de su altura celestial / siete coronas de laureles de la humanidad, / siete soles de honor inmortal. <<
Fragmento 5
[8] Debido a que los frentes del ejército ruso en la práctica son unidades independientes —con reservas, trenes, manutención y objetivos propios—, es imposible imaginar que se produzca un repentino traslado de recursos, al menos no mientras los envidiosos y pendencieros generales rusos sigan custodiando sus dominios tan meticulosamente delineados. <<
[9] Una especie de ingeniero militar cuyo principal cometido es construir fortificaciones y abrir y también demoler caminos. <<
[10] El turbio y nunca demostrado argumento pretendía que se había provocado el incendio a fin de avisar a los alemanes de la presencia de las tropas rusas. <<
[11] El motivo es de tipo logístico. Todos los ejércitos se mueven siguiendo horarios minuciosamente elaborados e inmensamente complicados, siendo una de las premisas del intricado cálculo de salidas y encuentros la velocidad, que debe ser constante por principio y baja por necesidad. Hay quienes afirman que durante estos transportes a veces era posible coger las flores que crecían en los terraplenes desde el tren en marcha, pero puede que sea una exageración. De lo que sí podemos estar bastante seguros es de que muchos lo intentaron. <<
[12] En esta época Rusia, como parte de su gran programa de modernización militar, había iniciado una reforma de la red de ferrocarriles. Dicha ampliación en la Polonia rusa provocaba auténtica dentera en el Estado Mayor alemán. Cuanto más velozmente pudiera reunirse un ejército y ponerse en marcha, mayor serían sus probabilidades de vencer; ése era el axioma. El plan Schlieffen alemán —que no era tal plan en el actual sentido de la palabra sino una simple Pro Memoria de 1905 que partía de la situación vigente tras la gran derrota de Rusia contra Japón— se basaba en que los rusos no tendrían tiempo de entrar en acción antes de que los franceses fueran eliminados. Los ferrocarriles constituían un factor crucial. En 1910 el ejército ruso solo habría podido disponer de 250 convoyes para su movilización (en comparación, mencionaremos que el tráfico regional en la región de Colonia por esta época era atendido por 700 trenes). En cambio, el programa de modernización significaba que había un número mucho mayor de trenes y que además, éstos podían trasladar efectivos más cerca de la frontera alemana. <<
Fragmento 7
[13] Mediante la eliminación de ese peso extra el barco se hundirá medio metro menos en el agua. <<
Fragmento 8
[14] Es necesario mencionar que hubo ciertas minorías nacionales que, de hecho, sí aplaudieron la guerra, al considerar que servir con lealtad sería un medio de conseguir un mayor respeto. Ésta fue la estrategia que muchos judíos, especialmente los más asimilados, eligieron en países como Alemania y Rusia —con más éxito en el primero que en el segundo, por el simple hecho de que el antisemitismo alemán era mucho menos fuerte que el ruso y que el francés—. En periódicos alemanes se cuentan historias sobre judíos alemanes que al estallar la guerra abandonaron Palestina y realizaron penosos viajes de vuelta a Alemania para alistarse como voluntarios. <<
[15] Los ducados de Schleswig, Holstein y Lauenburgo pasaron, como es sabido, a manos de Prusia tras la guerra germanodanesa de 1864 (en Suecia más conocida como el último suspiro del escandinavismo). Por esta época también vivía en el territorio una importante población de habla alemana. <<
[16] Como muchos otros brotes iniciales de la histeria suscitada por el temor a espías y traidores, también éste acabó por remitir, sobre todo una vez comprobado que los ciudadanos de habla danesa —como Andresen— respondían a la llamada de las banderas sin chistar. A los detenidos, incluyendo a su padre, los soltaron. Para una descripción perspicaz y entretenida basada en experiencias propias de la exaltación y la histeria antiespionaje reinantes en Alemania en agosto de 1914 léase el ensayo de Klara Johanson Krigsfångenskap (Prisioneros de guerra). <<
Fragmento 9
[17] Una vez más, la firma Hindenburg & Ludendorff ha conseguido realizar uno de esos traslados estratégicos por ferrocarril que el Estado Mayor ruso solo puede aspirar a soñar; los alemanes han trasladado fuerzas de una zona segura (en este caso Prusia Oriental) a una amenazada (aquí el sur de Polonia). Sin embargo, no estamos hablando de una nueva batalla de Tannenberg. Ambos lados se han dedicado a vagar sin objetivo de aquí para allá, o bien por no encontrar al enemigo o por no percibir que estaba allí. Lo que acaba de suceder es que los adversarios, sin quererlo, acaban de toparse de frente, aquí a las puertas de Opatov; los alemanes jugando el papel de entusiastas atacantes y los rusos el del ejército que se retira de mala gana. Para la campaña o para la guerra en total esta batalla no significará nada. Ambos bandos valorarán más tarde lo ocurrido como todo un éxito. <<
[18] Al comienzo de la guerra, la granada de fragmentación, o shrapnel, era, con diferencia, el tipo de proyectil de artillería más utilizado, y eso es válido para todos los ejércitos. Es un ejemplo típico de arma que parece genial sobre el papel. Cada granada contenía varios cientos de balines de plomo endurecido que eran expelidos del cuerpo cilíndrico mediante una pequeña carga de pólvora negra colocada en el fondo del proyectil, lo que hacía que el invento funcionara como una enorme escopeta de perdigones. El efecto deseado presuponía que la granada, mediante un temporizador especial, se hacía detonar en el aire justo frente al objetivo prefigurado, operación que no era demasiado simple; si estallaba encima de su cabeza los balines pasaban de largo. Además, exigía que el objetivo estuviese sobre tierra, lo cual motivó que este tipo de munición perdiera gran parte de su protagonismo a la que los combatientes empezaron a guarecerse en las trincheras. La pólvora negra del mixto producía las nubes blancas ligeramente oblicuas tan características de las explosiones de las shrapnels. <<
Fragmento 11
[19] Kuhr da la fecha del 11 de octubre, pero eso es, a todas luces, un error: primeramente porque la mencionada capitulación se proclamó el 10 de octubre, y en segundo lugar porque el 11 de octubre era domingo y ni siquiera los niños alemanes iban a la escuela los domingos. <<
[20] En esta época el trato que recibieron los prisioneros de guerra en el frente oriental —tal y como Alon Rachamimov ha demostrado— fue mucho mejor que durante la Segunda Guerra Mundial, durante la cual ambos bandos incurrieron en multitud de abusos y en el maltrato sistemático. Durante la Primera Guerra Mundial las condiciones de los presos fueron relativamente humanas, y más del 90 por ciento de los prisioneros capturados pudieron regresar a sus casas después del conflicto. Quienes más sufrieron fueron los prisioneros alemanes y los austrohúngaros en los campos de prisioneros rusos, debido a la falta de alimentos y sobre todo al tifus. <<
Fragmento 12
[21] A estas alturas nadie sabe con exactitud cuál fue el número exacto de bajas, pero se estima en unos 400 000 hombres. Y en menos de un mes. El historiador Norman Stone escribió: «La pauta de la guerra estaba ya trazada: en el frente occidental punto muerto, en el oriental una casi constante crisis por parte de los austrohúngaros». <<
[22] Es decir, la frontera entre Galitzia y Hungría. <<
Fragmento 13
[23] La fecha es aproximada. La datación en el diario de Corday de los años 1914-1918 resulta algo excéntrica: las entradas son cronológicas, pero no siempre se puede saber en qué momento una fecha pasa a ser otra. Su visita a la familia en Saint-Amand tuvo lugar entre el 22 y el 26 de octubre, y como los días laborables tenía que atender su trabajo en el Ministerio, es razonable suponer que el viaje se realizó el fin de semana del 24 al 25 de octubre. <<
[24] Que tomara el nombre supuesto de Corday se debe a que su familia estaba ligeramente emparentada con Charlotte Corday, la mujer que el año 1793 asesinó al dirigente revolucionario Marat, un hecho que, como todos sabemos, fue inmortalizado por Jacques-Louis David. Que el republicano convencido de que es Michel Corday eligiese el apellido de la contrarrevolucionaria Charlotte resulta interesante y sugiere un toque de vanidad o, al menos, la necesidad de resaltar sus orígenes. <<
Fragmento 15
[25] La fecha podría corresponder a un día anterior o incluso a uno posterior. <<
[26] El mando de esta sección esperaba el refuerzo de una unidad de artillería, pero debido a un simple malentendido le enviaron una de infantería, es decir, el batallón de Pollard. <<
Fragmento 16
[27] Siglas de His Majesty’s Australian Transport. <<
[28] Lo cierto es que los primeros disparos de la guerra entre Alemania y Gran Bretaña se intercambiaron en Australia, en el puerto de Sidney, el día 4 de agosto para ser más exactos, cuando un buque mercante alemán intentaba hacerse a la mar sin ser inadvertido y tuvo que ser disuadido mediante disparos al aire. <<
[29] Se trata de la pronto muy notoria escuadra del Pacífico de Maximilian von Spee, que dejó una estela de pánico y destrucción a su paso hacia el Este. A estas alturas la escuadra había alcanzado la costa oeste de Chile, donde inesperadamente, el día 1 de noviembre, venció a una flotilla británica en Coronel. En estos momentos grandes refuerzos británicos van de camino hacia el Atlántico Sur para vengar esa derrota en Coronel y acabar, a cualquier precio, con la escuadra de Von Spee. <<
[30] La formación de nuevos maestros en Australia respondía a un sistema parecido al de aprendices y oficiales según el cual los estudiantes de magisterio recién licenciados («junior teachers») daban clase bajo la tutela de un profesor principal. <<
[31] A estas alturas el Emden ya ha hundido 17 buques mercantes y está rodeado de una aureola romántica, primeramente debido a la astucia que demuestra su oficial al mando, el capitán de fragata Müller, pero también por su alto grado de humanidad, ya que siempre recoge a la tripulación de los barcos que hunde, los trata bien y se encarga de dejarles en tierra cuanto antes. Este caballeroso comportamiento se corresponde con lo que la mayoría de la gente todavía cree que debe ser la guerra. <<
Fragmento 17
[32] La parte de la tienda que cada soldado portaba fue bautizada por el humor de los soldados como «el ataúd de los héroes», ya que a menudo se utilizaba como sudario de los caídos en los funerales de campaña. <<
[33] Especie de mermelada hecha con una mezcla de manzana y naranja. <<
[34] La huida del ciervo. Popular novela del autor danés Christian Winther (1796-1876). <<
[35] No está claro qué pueda ser esto. Probablemente una novela alemana. <<
[36] Más tarde lleva realmente un banderín danés al campo de batalla, que junto con la novela de Winther reúne, según Andresen, «lo más valioso de Dinamarca». Es decir, que Andresen no era de ningún modo insensible a los latidos del nacionalismo, si bien esos latidos no eran por Alemania. <<
Fragmento 18
[37] Sobre todo considerando que Sembat ha trabajado junto a Jean Jaurès, el dirigente socialista que intentó detener el estallido de la guerra organizando una huelga general y fue asesinado el 31 de julio por un joven nacionalista francés. Para colmo, Sembat también es famoso por ser el autor de un célebre y muy divulgado libelo pacifista. <<
Fragmento 19
[38] Andresen ha podido observar lo mismo que la inmensa mayoría, que el tipo más corriente de munición artillera, las granadas de mortero, tienen un efecto insignificante sobre la tropa atrincherada. <<
[39] La alambrada del tipo que conocemos en la actualidad se inventó en Estados Unidos como un recurso agrícola. Con ella se pudo empezar a criar ganado a una escala impensable hasta entonces. La primera vez que es mencionada en un contexto militar, como barrera antiasalto, es en relación con la guerra francoprusiana de 1870-1871. Durante la Guerra de Cuba de 1898 es sabido que las fuerzas americanas utilizaron alambradas para proteger sus campamentos. Aunque la alambrada se menciona en el reglamento del ejército británico ya en 1888, los ejércitos involucrados en la guerra de 1914 partieron al frente sin ella, pues lo previsto era que el conflicto fuese muy movedizo y de rápida resolución. Cuando se empezaron a excavar las primeras trincheras en otoño de 1914, en el mejor de los casos se podían hallar improvisadas barreras defensivas de alambre espinoso conseguido en los pueblos circundantes. (Pese a ello, el fenómeno fue bastante inusual, como sugiere el hecho de que el término «alambrada» no se adopta de forma unitaria de inmediato. Algunos la llaman, por ejemplo, «valla de alambre espinoso»). Durante este periodo inicial se utilizó el alambre del tipo que fuera, también alambre sin púas. Además, las barreras antiasalto solían ser delgadas y a menudo consistentes en una única hilera de estacas unidas entre sí por tres o cuatro hilos de alambre. Pero pronto se puso en marcha la producción de alambre espinoso para su uso en campaña: el que hasta entonces se había utilizado en agricultura tenía, por lo general, siete pares de púas por metro, mientras que el nuevo alambre espinoso militar tenía, como mínimo, catorce pares de púas por metro. Por otro lado, las alambradas se volvieron más anchas y más densas. Un reglamento francés del año 1915 establecía que la barrera antiasalto mínima tuviera dos filas de estacas colocadas a una distancia entre sí de unos tres metros, mientras que un reglamento británico de 1917 estipulaba que el obstáculo de alambre de púas tuviera una anchura mínima de diez. Además, pronto fueron utilizadas diferentes variantes, algunas de las cuales eran transportables, como «los jinetes españoles», «los cubos», «los erizos», «el grosellero» y «el cuchillero». El reglamento británico arriba mencionado también cataloga una variedad de alambradas fijas, como apron, double apron, fence and apron, trip and loose wire, concertina (también denominado brun wire), trip and crossed diagonals, rapid double fence, low wire, French rapid wire, high and low wire combination (solo de esta última habían seis tipos diferentes). Durante un tiempo se experimentó asimismo con alambradas eléctricas, pero se consideraron poco prácticas. El francés Olivier Razac ha dicho que la alambrada, aunque no pueda decirse nunca que sea una metáfora de la Primera Guerra Mundial, ha jugado un papel importante en los intentos del arte de «representar la monstruosa sublimidad de las fuerzas destructivas desatadas por la guerra moderna». <<
[40] Las onomatopeyas son del propio Andresen. <<
[41] El hecho de que empezaran a decorar sus trincheras con tanto esmero —no tardó en haber refugios con lámparas eléctricas en el techo, alfombras cubriendo el suelo y revestimientos de madera en las paredes— se debe a que el ejército alemán en el oeste ya se había mentalizado para una posición defensiva a largo plazo. Mientras, por motivos puramente ideológicos, el ejército francés en ningún momento quiso dar la impresión de que pensaba quedarse en sus trincheras, así que durante toda la guerra estas tendrían un cariz altamente improvisado. En el Este, cosa poco sorprendente, el ejército austrohúngaro enseguida buscó el máximo confort. Al parecer, hubo casos de refugios con ventanas de cristal, lo cual podría parecer bastante paradójico. <<
Fragmento 21
[42] El respeto a la jerarquía decidió la cuestión. ¿Cómo iba un teniente a pedir la palabra para plantear peliagudas cuestiones a su jefe supremo, el ministro de la guerra? <<