Pienso en ti si irradia del mar
el sol luciente;
pienso en ti si la luna al rielar
pinta en la fuente.
Te veo si en el camino a lo lejos
el polvo se eleva;
en la noche profunda, si en el sendero
el caminante tiembla.
Te oigo si allí con sordo susurro
la ola se alza.
En el bosque silente escucho a menudo
cuando todo calla.
¡Yo estoy contigo; aunque tan lejano sigas
te siento cerca!
El sol se pone; pronto las estrellas brillan.
¡Si aquí estuvieras!
1795