«Volksmärchen der Deutschen»
(«Cuentos populares de los alemanes»)
Los cuentos de Musäus se imponen una y otra vez asombrosamente a pesar de los muchos ataques dirigidos contra ellos. Musäus fue el primero que intentó coleccionar y recontar los cuentos populares alemanes. Lo hizo espléndidamente, con una fuerza creativa y un arte formal que no se pueden admirar bastante, pero completamente en el espíritu y estilo del siglo XVIII. Más tarde, después de que Brentano y Arnim publicasen sus canciones populares y los hermanos Grimm sus magníficos cuentos, cuando el mundo se hallaba bajo el signo del romanticismo, Musäus perdió su importancia y adquirió la fama de viejo pedante que había violentado los cuentos antiguos para meterlos en sus delicados moldes rococó. Sin embargo, también el romanticismo se pasó un buen día de moda y se vio que aquí y allá se seguía leyendo al viejo Musäus y así volvió a surgir de nuevo hasta nuestros días del aparente olvido. Sus historias de «Rübezahl» y su «Richilde» son además creaciones realmente deliciosas y uno se alegra de ver cómo se imponen las cosas vivas y da la bienvenida al viejo Musäus.
(1921)