«In der Zwischenzeit»
(«En el intermedio»)
Sus pequeñas reflexiones, narraciones y glosas irónicas han ocultado siempre tras su superficie elegante y ligera una callada melancolía que se ha reforzado y vuelto un poco amarga en su nuevo libro. La culpa de ello no la tiene sólo la emigración. El literato que desempeña una labor periodística y que depende del aparato de los periódicos, podrá alcanzar un nivel alto en el desarrollo de su especialidad, podrá dominar su arte con enorme elegancia, pero a la larga le quedará una insatisfacción y algo de la envidia que siente el músico hacia el compositor. Polgar expresa a veces este sentimiento abiertamente y es tan injusto como el que hace juicios generales desde una situación personal de desánimo o incluso de tragedia. Pero sigue conservando sus brillantes propiedades y una y otra vez da en sus artículos ese tono de ingenio y melancolía, entre broma y sabiduría, que nos gusta en él.
(1935)