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—A veces, cuando estoy esperando y no me llamas —dijo ella— tengo la sensación de que es a mí a quien estamos tratando de desquiciar.

—Lo siento —se disculpó él—. Pero tengo buenas noticias. Creo que está ocurriendo.

—Oh, qué tierno. ¿Qué era lo que decía Sherlock Holmes, «el juego está en marcha»? ¿O era Shakespeare?

—No estoy seguro —respondió él.

—Así pues, lo has entregado.

—Sí.

—Pero tienes que quedarte un poco más de tiempo para ver qué ocurre.

—Oh, ya lo sé —dijo él—. Estoy seguro de que terminará apareciendo en las noticias.

—Ojalá pudiera grabarlo desde aquí.

—Llevaré los periódicos a casa.

—Oh, eso me encantaría —dijo ella.

—No han dicho nada más de Tess. Supongo que eso significa que no han descubierto nada.

—Supongo que deberíamos sentirnos agradecidos por lo que la fortuna pone en nuestro camino, ¿no?

—Y salió algo más en las noticias, sobre el detective que ha desaparecido. El que mi… ya sabes… contrató.

—¿Crees que lo encontrarán? —preguntó ella.

—Es difícil de decir.

—Bueno, no podemos preocuparnos por eso —dijo ella—. Pareces un poco nervioso.

—Supongo que sí.

—Ésta es la parte difícil, la arriesgada, pero cuando todas las piezas acaben encajando habrá valido la pena. Y en ese momento, podrás venir a recogerme.

—Lo sé. ¿No se preguntará él dónde estás, por qué no vas a verle?

—Apenas me dirige la palabra —dijo ella—. Se está yendo. Nos queda quizás un mes; tiempo suficiente.

—¿Crees que alguna vez nos quiso de verdad? —preguntó él.

—La única persona a la que él ha querido es ella —contestó sin tratar de disimular su amargura—. Y ella, ¿ha estado ahí alguna vez cuando él la necesitaba? ¿Ha cuidado de él? ¿Y quién resolvió su mayor problema? Nunca me ha agradecido lo que he hecho por él. Es con nosotros con quien se ha cometido una injusticia. Nos robaron la posibilidad de tener una familia de verdad. Lo que estamos haciendo ahora es sólo reclamar justicia.

—Lo sé —dijo él.

—¿Qué quieres que te haga cuando vuelvas a casa?

—¿Qué tal un pastel de zanahoria?

—Perfecto. Es lo menos que puede hacer una madre.