Triángulo

Si se echa sobre el flanco,

sin saberlo, vuelca la virgen todo un bosque.

Si se tiende sobre el vientre,

ansiando todas las raíces, se olvida de sí misma.

Si se estira sobre el dorso

sabe que alguien ha levantado el árbol de mayo directamente en el hogar.

Y él, mientras tanto, ante un jarro de una pinta

se muerde los labios en el momento del lápiz

y va a escribir… Y tal vez

después pegará el sobre

sólo porque se avergüenza de la carta.