Sólo hoy en un sitio y otro están desplumando el faisán
destinado a la mesa del rey Sargón.
Sólo hoy el doble cuarto de tono de los pájaros hace tiempo extinguidos
vive en la música de los bailes bárbaros.
Sólo hoy la difteria común de los dibujos de roca
halla gloria animal en la garganta de la ópera.
Sólo hoy Tántalo o el bezoar
se muestran en el bajo vientre de una antigua estatua.
Nada regresa del otro mundo. Todo está aquí.
Pero incluso el que de nosotros está ya dentro
tiene que seguir entrando siempre…