Dos vidas

Cuando por un momento nos detuvimos en la plaza del pueblo

y miramos el viento juguetón en las faldas de la paja,

Lao—Tse dijo: La vida que encierran los libros

no puede ser como la que se nutre de música.

En las bodas de los dioses las suelen emparejar en vano,

aunque ambas, endiosadas, lo deseen…

Una de ellas sabe que el presente no es el mero día de hoy,

la otra que es precisamente el secreto lo que no se puede ocultar,

y ambas que el misterio se debe revelar por sí solo.

Esta humildad las acerca involuntariamente

a la vida de los más sencillos mortales…