Terrenales, toscas fosas de culto,
y, con todo, precisamente en ellas encastó sus filamentos
la raíz del Espíritu Santo…
La apertura y saqueo de los túmulos,
y, con todo, precisamente en ellos se enardecía
la vena del ermitaño…
El deseo penetra la más notoria realidad,
pero lo que celosamente se refleja es el misterio
que nos amenaza con la desaparición de lo divino,
si no empezamos de nuevo…