[1] No cuento Cartas de un asesino insignificante, que, por haber sido publicada en un volumen para ella sola, quizá se hace merecedora del calificativo de «menos breve». <<
[2] Cuando reproduje la partida sobre el tablero con piezas de verdad, observé que los movimientos del peón coronado en dama de las blancas (la ficha que más usó mi enemigo) imitan un maltrecho símbolo matemático del infinito , ¡muy propio!