Notas

[1a] El aparte es un variante del monologo (diálogo). En él el personaje habla consigo mismo, pero parece que se dirige hacia al espectador. Se supone que su objetivo es exponer los secretos íntimos del personaje, pero también puede expresar superficialidades de sí mismo o de otros personajes. El aparte puede estar o no marcado en el texto, en el teatro clásico no se marcaban, sino que se suponían. Desde la fijación de normas del neoclásico sí se marcan.

El teatro realista de los siglos XIX y XX optó por prescindir de este tipo de recursos, pero variables corrientes no han dudado en utilizarlo. <<

[1] Animal fabuloso, mitad caballo y mitad ave. <<

[2] Es muy frecuente en la época, y sobre todo en Calderón, esta comparación del caballo con un mapa en el que están representados, los cuatro elementos, fuego, aire, agua y tierra («rayo», «pájaro», «pez» y «bruto»). <<

[3] Faetón, hijo del Sol. <<

[4] Nótese la diferencia semántica entre «a penas» (con dificultad) y «apenas» (inmediatamente). <<

[5] No me apartes de sus asuntos. <<

[6] Con tal que. <<

[7] Barbudo. <<

[8] Ya aparecen aquí dos elementos fundamentales del Barroco y constantes en esta obra: la importancia de la vista (en relación con la importancia de la pintura) y la confusión entre realidad y apariencia. <<

[9] Condenado a galeras. <<

[10] El motivo del disfraz, tan frecuente en el teatro de la época, está en relación con el tema de la apariencia-realidad; engaño-desengaño; vida-sueño, conceptos sobre los que está asentada esta obra. <<

[11] «Los grillos y cadenas que echan al que está preso». <<

[12] En este primer monólogo, de gran efectividad dramática, puesto que el espectador escucha las palabras antes de ver al personaje, Segismundo se rebela contra la injusticia y la falta de libertad, equivalente a falta de vida. <<

[13] «Averiguar y llegar a saber de raíz y con fundamento alguna cosa». <<

[14] Aquí equivale a concluir. <<

[15] De entre todos los animales destaca los que simbolizan los tres elementos, para concluir con el fuego, cuya fuerza y pasión le domina en ese instante. <<

[16] Los espacios del firmamento. <<

[17] La importancia de la pintura en el Barroco es fundamental, y el tema del Deus pictor es un tópico de Calderón. Aquí aparece referido a la Naturaleza. <<

[18] Alude al Minotauro y define el concepto de la vida barroca. <<

[19] Huevas y algas. <<

[20] El lugar más profundo del mar. <<

[21] Frase tópica en la poesía del XVII para expresar la pasión. <<

[22] Arroyo, agua en general. <<

[23] Para que. Valor final. <<

[24] Nótese en este monólogo cómo están contenidos los rasgos fundamentales que determinan el carácter de Segismundo. La presencia de Rosaura, asimismo, significa el principio de su conversión, gracias a la ternura que infunde en el príncipe. <<

[25] Nunca saciados de beber. <<

[26] Este apólogo procede de la tradición medieval. Tiene gran relación con el «Exemplo X» de Don Juan Manuel: «De lo que contegió a un omne que por pobreza et mengua de otra vianda comía atramuzes». (El conde Lucanor). <<

[27] En masculino porque Rosaura va disfrazada de hombre. <<

[28] En femenino por que «guardas» en la época era femenino. <<

[29] Vencer un estorbe que impide la libertad. <<

[30] Encargado de la custodia. <<

[31] Esta anteposición del pronombre era arcaísmo en la época, usado poéticamente. <<

[32] Serpiente venenosa, pequeña. <<

[33] Estos versos los transcribió A. Machado en Juan de Mairena para ejemplificar cómo el poder de la retórica puede superar al de la propia acción. <<

[34] Frase repetida en Calderón: asombro, admiración. <<

[35] Por el hado. <<

[36] Los Gigantes se rebelaron contra los Dioses llevados de su soberbia. <<

[37] Según la teoría de Ptolomeo, el cielo es como una esfera gigante. La fiase un como destacó E. Rull (op. cit.), que Segismundo quebró, a la luz del sol, los vidrios y cristales del cielo. <<

[38] En la época significaba piedra preciosa y cantera de piedras. <<

[39] Valor final. Para que. <<

[40] En mayúscula porque son símbolos o abstracciones, propios de autos sacramentales. <<

[41] Mezclado. Alusión a un tipo de tocino llamado así. <<

[42] El rasgo de entregar una espada a Clotaldo, y así identificarse como su hija, coincide con la historia de Teseo, quien también entrega a su padre, Egeo, una espada que le identifica como su hijo. <<

[43] Se corresponde una cosa con la otra. <<

[44] Compara el corazón con un ave. <<

[45] Pacto con otra persona por el que se somete a ella en servidumbre. <<

[46] Son las cualidades precisas para triunfar en el mundo barroco. Ya el Lazarillo las destacó de manera práctica, y Gracián, en quien culmina el desencanto barroco, las sistematizó en El Criticón y en Agudeza y arte de ingenio. <<

[47] Riesgo moral que daña espiritualmente. <<

[48] «Crueldad o exceso en el castigo, pena o reprehensión». <<

[49] Sus ojos fueron cometas porque le miraron y enseguida le evitaron. <<

[50] Doble sentido: disparos de armas y canto o música de las aves. <<

[51] Tambores. <<

[52] Diosa del amanecer que abre el día. <<

[53] Atenea como diosa de la guerra. <<

[54] Diosa de las flores y de la primavera. <<

[55] Se utilizaba el masculino ante palabras que empezaban por a. <<

[56] Por el acompañamiento militar que lleva Astolfo. <<

[57] Perífrasis para decir que murió. <<

[59] Perífrasis para expresar cómo se hace viejo. <<

[60] Unimos, ponernos de acuerdo. <<

[61] Con las armas de su belleza. <<

[62] Culmine. <<

[63] Generosidad. <<

[64] En las comedias de la época es tópico el recurso del retrato de su dama que el enamorado lleva colgado al cuello. <<

[65] Sabios de la cosmografía y de la geometría. <<

[66] Mediante estas expresivas bimembraciones, Calderón destaca la afición del rey a la astrología, muy de moda en la época, como lo atestiguan los populares Avisos de Pellicer y la abundancia de tratados cultos. <<

[67] Abrazadme. <<

[68] Molestias de la edad. <<

[69] Pintor y escultor clásicos. Pintura y escultura en general. <<

[70] Su saber se anticipa a la enseñanza del tiempo. <<

[71] Sigue la teoría de Ptolomeo. <<

[72] En Calderón es muy frecuente esta imagen del cielo como libro escrito por Dios con caracteres de perdurabilidad y validez eterna («diamante», «oro»). <<

[73] Placiera. <<

[74] Comentario. <<

[75] Alude a la leyenda de la víbora, que según Plinio, al parir corta la cabeza al macho, y las crías matan a la madre. Compara así la maldad de la víbora con la del hombre. <<

[76] Enfermedad que deja aparentemente muerta a una persona. Voz muy usada en Góngora y en Calderón. <<

[77] Nótese cómo ya aparece en la obra la posibilidad de superar el hado por el estudio y el esfuerzo. <<

[78] Previsor. <<

[79] La contradicción en la que se debaten los personajes de Calderón entre la razón y la fe, la voluntad y el deber nos recuerda continuamente a los personajes unamunianos de Amor y Pedagogía, Niebla o San Manuel Bueno, mártir. <<

[80] Pensativo. <<

[81] Aparezca. <<

[82] Metáfora para expresar el gran esfuerzo que deben hacer. <<

[83] Rosaura disfrazada de hombre. <<

[84] Puesto que. <<

[85] Expresión cómica CLARÍN: en la que se funden mirar y besar (fonéticamente). <<

[86] Tú mismo. <<

[87] Como Rosaura está deshonrada, no tiene vida y, si Clotaldo le ayuda a restaurar su honor, él le dará la vida (cuando es también su verdadero padre). <<

[88] La espada. <<

[89] Nótese la postposición del pronombre átono. <<

[90] Lleguemos a conocerlo lo más posible. <<

[91] Que te hace actuar desenfrenadamente. <<

[92] En la época, el rey o señor simbolizaban la justicia, por lo que los súbditos no podían ser agraviados por quienes ostentaban esta facultad. <<

[93] Además de aludir al Laberinto de Creta, estos versos resumen la concepción conflictiva de la vida en el Barroco, expuesta en esta primera jornada. Las palabras laberinto, confusión, abismo, prodigio y el mismo disfraz de Rosaura permiten alcanzar un clímax dramático adecuado para el siguiente acto. <<

[94] Agradable. <<

[95] Compuesto de elementos bien proporcionados (opio, adormidera y beleño). <<

[96] Razón. <<

[97] Planta cuya raíz produce efectos narcóticos. <<

[98] Águila caudal o real. <<

[99] Una de las esferas que rodea la Tierra según Ptolomeo. <<

[100] Desprendido. <<

[101] Razonamiento. <<

[102] Bebida medicinal. <<

[103] Corriendo a través de. <<

[104] Premio. <<

[105] La Iglesia prohibía que se afirmase que los astros podían forzar el libre albedrío, pero no que pudieran inclinarlo. (Véase Olmedo: Las fuentes de La vida es sueño, Voluntad, Madrid, 1928, pág. 192). <<

[106] Tiene mayor poder que el hado. <<

[107] A sí mismo, es decir, controla sus impulsos negativos. <<

[108] Prisión, por «cadenas». <<

[109] Calderón utiliza aquí como efecto teatral la concepción barroca de la vida, reiterada en toda su obra, como en la de Shakespeare, y recogida después por Unamuno en su poesía, teatro, novela y ensayo. <<

[110] Acércate. <<

[111] A sí mismo. <<

[112] Soldado armado con una especie de lanza. <<

[112a] Que le salió barba de su librea (traje). <<

[113] Los ojos. <<

[114] Boletos o entradas para un espectáculo. <<

[115] Comerciante, porque llevó su desdicha (mercancía) hasta Polonia. <<

[116] Porque se consideraba indecente a la mujer que vestía de hombre. Era tema muy común en el teatro del Siglo de Oro la mujer vestida de hombre, aunque en Calderón no es frecuente este recurso. (Véase C. Bravo, Villasante: La mujer vestida de hombre en el teatro español, S. G. E. L., Madrid, 1976). <<

[117] Defiendas su honor. <<

[118] Como. <<

[119] Estos versos proceden del romance de Góngora «Contando estaban sus rayos», y se repiten también en otras obras como Céfalo y Pocris. Es frecuente encontrar en Calderón canciones de Góngora, como la famosa «Las flores del romero» en El Alcalde de Zalamea (II J. VV. 1231-34). <<

[120] Proceso lógico, razonamiento. <<

[121] Símbolo clásico de la gloria y el triunfo. <<

[122] Vencerlas. <<

[123] Si en la Jornada I (VV. 736-37) ya se apuntaba la posibilidad de superar los pronósticos mediante el esfuerzo humano, aquí aparecen concretadas las virtudes morales como único elemento capaz de cambiarlo. <<

[124] Aquí comienza el comportamiento negativo de Segismundo que le llevará de nuevo a su estado miserable del principio. <<

[125] Color rojo que toman las nubes al amanecer o al anochecer. <<

[126] Así demostraba Astolfo a Segismundo su nobleza. <<

[127] Juego de palabras entre estrella y sol. <<

[128] Felicitación. <<

[129] Aire suave, no poético. <<

[130] Blancura que produce resplandores. <<

[131] Aunque pudiera tratarse de una incorrección geográfica, hecho frecuente en Calderón, bien puede referirse al estanque de Ontígola, que se llamaba mar en esa época. (Ver E. Rull, op. cit., págs. 186-188). <<

[132] Detenimiento. <<

[133] Crueldad. <<

[134] Genio, índole o inclinación propia de cada uno. <<

[135] La concepción barroca de la existencia, ilustrada a través de los motivos vida-sueño y engaño-desengaño, sirve de nuevo aquí también como recurso teatral. <<

[136] Vuelve a recordar Segismundo, ahora ya con pleno conocimiento de su origen, su condición de hombre y fiera como había destacado en el Acto I: «soy un hombre de las fieras, / y una fiera de los hombres.» (VV. 211-212). <<

[137] Esta admiración por la belleza femenina está en relación con la idea platónica de la belleza materializada en la mujer, tan importante a partir de Petrarca. <<

[138] Sospecho. <<

[139] Abreviación. <<

[140] El motivo de las flores es muy frecuente en el arte barroco (pintura y poesía sobre todo) para expresar la belleza natural y su caducidad. <<

[141] La comparación de elementos naturales con piedras preciosas para magnificar aquéllos es otro recurso propio del Barroco, que considera, por su perduración, superior el Arte a la Naturaleza, en la que todo acaba muriendo <<

[142] Convencer con razones. <<

[143] Fácil. <<

[144] Palabras ofensiva. <<

[145] Rápidamente. <<

[146] Porque Clotaldo es anciano. <<

[147] Lugar sagrado o sitio que asegura de algún peligro. <<

[148] La extrañeza del rey Basilio se debe a que no era frecuente utilizar la espada dentro de los recintos nobles. <<

[149] Véase cómo constantemente Calderón insiste en disminuir el valor de los bienes mundanos reduciéndolos a sueños, mientras que considera más real la desgracia, como refiere Astolfo en los versos siguientes. <<

[150] Crueldades. <<

[151] Metáfora para expresar los ojos. <<

[152] En la época significa imitar, remedar. <<

[153] Telón, escena. <<

[154] Nótese el parecido ESTRELLA: del nombre utilizado ROSAURA: ahora por Rosaura con Estrella. <<

[155] Oculté. <<

[156] Háblele de él. <<

[157] Ave mitológica que renacía de sus propias cenizas. <<

[158] Por su belleza (ilumina el día) y sentimiento amoroso. <<

[159] Juego de palabras: personaje y hado. <<

[160] Resuelto. <<

[161] Infiel, traidor. <<

[162] Razonamientos. <<

[163] Devolverme. <<

[164] Es decir, no está mal el parecido. <<

[165] Recuerdes. <<

[166] Interjección, expresa pesar. <<

[167] Reflexionar, sacar consecuencias. <<

[168] Juega con el nombre y el objeto que designa. <<

[169] Ícaro, hijo de Dédalo, fabricó unas alas de cera para escaparse de la prisión de Minos, pero, al volar muy alto, se acercó al sol, y la cera se derritió, cayendo ícaro al mar. Hay aquí una burla de los mitos clásicos, muy frecuente en las artes barrocas. <<

[170] Considera «poquita cosa» al soldado que cayó al mar. <<

[171] Nótese cómo, además de la burla mitológica, Clarín parodia los temas trascendentales de la época (muerte-vida; sueño-despertar). <<

[172] Bocina de cuerno e instrumento de menor calidad que el clarín. <<

[173] Embozado. Tapado <<

[173a] Símbolo cuya propiedad es provocar el olvido <<

[174] Científicamente, el loto no tiene propiedades narcóticas, pero una leyenda muy difundida atribuía a esta planta la pérdida de la memoria, porque en ella se convirtió la ninfa Lotos para huir de Príapo. <<

[175] Concepto muy reiterado en el Barroco que resume el tema de la apariencia-realidad, y asimismo expresa el carácter teatral de la época. Es, además, el título de uno de los autos más famosos de Calderón: El gran teatro del mundo. <<

[176] Sin igual. <<

[177] Disimulo. <<

[178] Recuérdese la primera escena, donde Clotaldo habla con Basilio indicándole cómo le ha dado el narcótico a Segismundo, y la conversación mantenida con él, en la que se cita al águila caudal. <<

[179] Torpe. <<

[180] Dime. Arcaísmo ya desusado en la época. <<

[181] Obsérvese cómo Calderón insiste en mantener la confusión entre sueño y realidad salvando, sin embargo, el amor como único sentimiento capaz de perdurar. Esta característica ya la había destacado Quevedo en toda su poesía amorosa. <<

[182] El carácter didáctico de la obra se manifiesta aquí directamente, aunque ya se había apuntado en los VV. 736-37 y 1285-87. <<

[183] Preocupaciones. <<

[184] Instrumentos de viento, parecidos al oboe. Eran muy frecuentes en la época de Calderón, aparecían en los momentos en que intervenía la música, sobre todo en los autos sacramentales. <<

[185] Embustes, engaños. <<

[186] Los penitentes do las procesiones de Semana Santa. <<

[187] Juego de palabras: Ni-como, Ni-ceno. <<

[188] Variante del refrán «Al buen callar llaman Sancho». <<

[188a] Las necesita. <<

[189] Sería. <<

[190] Expresión de desprecio. <<

[191] Fingidos. <<

[192] Malogrado. <<

[193] Es muy frecuente en el teatro de la época la utilización de derivados de nombres propios con intención cómica. <<

[194] Ayudado. <<

[195] Derivado de bando, partidarios. <<

[195a] El tiempo, «protagonista del drama barroco», como señaló Orozco (Manierismo y Barroco, Anaya, Salamanca, 1970, págs. 57-62), es el tema más repetido en la poesía de la época y del que deriva el desengaño y la concepción nihilista del mundo. <<

[196] Término pictórico. Figura no definida. <<

[197] Capullo. Término poético. <<

[198] Esta afirmación encierra un doble sentido, político y religioso. El poder no es eterno y en cualquier momento puede desaparecer; en último término, todo ha de devolverse a Dios, porque la vida sólo es prestada. <<

[199] Cumplir la predicción de los hados. <<

[200] La estrella que guía a los navegantes. Orientación. <<

[201] Aquí queda patente que, para Calderón, lo natural en el hombre es la maldad, que debe ser reprimida por el esfuerzo de la razón. <<

[202] Se utilizaba el masculino ante palabras iniciadas por «a». <<

[203] Un caballo tan veloz como el rayo. <<

[204] Remedio. <<

[205] Anticipa. <<

[206] Preservar alguna cosa del daño que le puede sobrevenir. <<

[207] Imágenes de la muerte dispuestas en una gradación de lo más alto a lo más bajo: «pirámide», «monumento», «sepulcro» y «esqueleto». <<

[208] Diosa que presidía las batallas. <<

[209] Atenea, diosa de la guerra. <<

[210] Recobrar. <<

[211] Es muy frecuente en Calderón este tipo de argumentaciones lógicas para defender las posturas contradictorias de los personajes. <<

[212] Lugar sagrado, convento. Era costumbre en la época acogerse a un lugar sagrado (iglesia, convento) para escapar de la justicia cuando se había cometido un delito. <<

[213] Observa cómo de nuevo los conceptos contrapuestos de paz/violencia, muerte/vida, amor/desamor, honor/deshonra, se hacen presentes en la obra. Estos juegos con conceptos contrarios son propios de todas las expresiones artísticas del Barroco y abundantísimos en Calderón.
La muerte, como liberación de las ataduras terrenales, vuelve a aparecer en numerosas obras teatrales de Calderón. <<

[214] De nuevo surgen los impulsos primitivos de Segismundo («su fiera condición») que enseguida son sometidos a la razón para conseguir su propósito. <<

[215] Alusión al caos anterior al mundo y al desorden presente. <<

[216] Animal que tiene la piel manchada <<

[217] De color pardo claro. <<

[218] Vestidura a modo de sayo propia de los pastores de vacas. <<

[218a] Presume. <<

[218b] Alegría. <<

[218c] En la época era femenino. <<

[219] Pagano, para así sentirse un dios mitológico. <<

[220] Las tres transformaciones de Júpiter. <<

[221] Júpiter se transformó en lluvia de oro para tener acceso al recinto en que se hallaba Dánae y conseguirla; en cisne, para conquistar a Leda, y en toro, para raptar a Europa. <<

[222] Falsas, traidoras. <<

[223] Repara. <<

[224] Calderón se refiere a Cartago, y no a Troya, porque fue allí donde Eneas dejó la espada con la que se mató Dido. <<

[225] Sinónimo de confusión. <<

[226] Pedir la venia o permiso. <<

[227] El vaquero, traje de Diana; los arneses, traje de guerra de Palas. <<

[228] Recobres. <<

[229] Detenedme la memoria. <<

[230] «Saber alguna cosa ciertamente, o por experiencia…». <<

[231] «Se aplica como adjetivo a las cosas que no son vivientes, pero duran largo tiempo». <<

[232] Mirar y acechar con cuidado. <<

[233] Cierto modo de jugar a los naipes. <<

[234] Embiste, acomete. <<

[235] Gesto de burla. Hacer la higa tenía un sentido de burla y era, a su vez, una superstición con la que se disipaba el mal de ojo. «Acción que se hace con la mano, cerrado el puño, mostrando el dedo pulgar por entre el dedo índice y el de en medio». <<

[236] Enseguida. <<

[237] Preservado. <<

[238] E. Rull ha destacado la reminiscencia mitológica oculta en este verso basada en el nombre de Aura, una cazadora compañera de Artemisa y famosa por su rapidez (op. cit., pág. 268). <<

[239] Promesa. <<

[240] Conoce. <<

[241] Evitar la crueldad. <<

[242] Extensión del mar o abundancia en general. <<

[243] Virtudes que se consideraban necesarias para triunfar en la época. Recuérdese, por ejemplo, La prudencia en la mujer, El Criticón o La agudeza y arte de ingenio. <<

[244] Te venciste a ti mismo. <<