¿Qué son las faltas de conducta? Las faltas de conducta son las que se derivan de un comportamiento inadecuado. Las pueden cometer los entrenadores, delegados, o jugadores que están en el banquillo (fuera del agua), o los jugadores que están en el agua durante el partido. Si el entrenador, delegado o jugadores del banquillo, tienen un comportamiento inadecuado, el árbitro les podrá mostrar la tarjeta amarilla o roja, según sea el caso. La falta de disciplina en los banquillos no se debe tolerar.
Las faltas de conducta en el agua, se pueden clasificar de la siguiente forma:
Acción: | Sanción: |
Desobediencia | Expulsión por todo el partido con sustitución |
Falta de respeto | Expulsión por todo el partido con sustitución |
Mala conducta | Expulsión por todo el partido con sustitución |
Conducta antideportiva | Expulsión por todo el partido con sustitución |
Desobediencia. —WP 22.11—. Desobediencia es no hacer caso de las instrucciones de los árbitros. Se incluye el no prestar atención a los avisos de los árbitros. La sanción por la desobediencia es la expulsión por todo el partido con sustitución a los 20 segundos. La única excepción que prevé el reglamento a esta situación es la del portero que no obedece correctamente la instrucción de quedarse bajo los palos de la portería en el lanzamiento de un penalti. En este caso la sanción es la expulsión por 20 segundos.
Falta de respeto. —WP 22.11—. Falta de respeto es una mala conducta hacia los árbitros o resto de miembros del jurado. Incluye dejar el agua por un jugador expulsado durante el juego, uso de lenguaje inapropiado, gesticular o salpicar a los árbitros. La sanción es la expulsión por todo el partido con sustitución a los 20 segundos. Cuando esta falta de respeto tiene lugar en los intervalos entre periodos, tiempo muerto o después de un gol, sin haberse reiniciado el juego, el jugador será expulsado pero su equipo empezará con siete jugadores.
Mala conducta. —WP 22.9—. Mala conducta es un comportamiento inadecuado realizado por el entrenador, jugadores o espectadores. Incluye el uso de reiterado de faltas exageradas, lenguaje o gestos obscenos o conductas antideportivas que no se deben tolerar en el deporte. La sanción es la expulsión de todo el partido con sustitución a los 20 segundos. También se considera como mala conducta la acción en la que un jugador, defensor o atacante, coge del gorro o de sus cordones al contrario.
Se deben señalar las faltas de mala conducta. Estas faltas se deben señalar de forma coherente y su señalización se debe reforzar de una forma enérgica (aunque sin exagerar). Se deben señalar cuando suceden aunque en algunas ocasiones, el árbitro se abstendrá de señalarlas inmediatamente, debido a que haya una situación de clara oportunidad de gol; en este caso, el árbitro no parará el juego y esperará a que finalice la jugada. Aún así, deberá señalar la falta lo antes posible.
En ocasiones, cuando se genera un barullo de palabras y gestos en el agua y se corre el riesgo de que se forme una «tangana», o cuando un jugador aparece nervioso dispuesto a encararse con otro jugador o incluso con el árbitro, puede ser una buena solución ordenar el inmediato reinicio del juego. Al reiniciarse el juego, los jugadores están obligados a jugar si no quieren encajar un gol rápido y, posiblemente, desaparecerá la amenaza sin que haya ido a más y sin necesidad de sanciones más graves.