Llegamos con esto a la cuarta categoría de esta esfera ontológica de los valores, y esta cuarta categoría es la jerarquía. Los valores tienen jerarquía. ¿Qué quiere esto decir? Hay una multiplicidad de valores. Ya les he citado a ustedes una multitud de ellos. Estos valores múltiples son todos ellos valores, o sea modos del valer, como las cosas son modos del ser. Pero los modos del valer, son modos de la no-indiferencia. Ahora, el no ser indiferente es una propiedad que en todo momento y en todo instante, sin faltar un ápice, tiene que tener el valor. Luego la tienen que tener también los valores en sus relaciones mutuas. Y esa no-indiferencia de los valores en sus relaciones mutuas, unos con respecto a otros, es el fundamento de su jerarquía. Comprenderán ustedes mucho mejor esta categoría ontológica del valor, que llamo jerarquía, cuando hagamos rápidamente una clasificación de los valores. Vamos, pues, a hacer una clasificación de los valores. EJ problema es difícil y no voy a entrar a exponer a ustedes las dificultades porque nos llevaría muy lejos. El problema de clasificar los valores ha sido estudiado por casi todos los filósofos contemporáneos que se han ocupado del valor.