SABER

El poema nada en un vientre y brilla.

No sabe quién es hasta

que lo arrastran aquí, donde

seguramente morirá

a la intemperie de las bestias.

Me gustaría entender a las bestias para

entender mi bestia. La

realidad hace gemir con jadeos de animal.

¿Qué gracia fue ganada en su respiración?

Ninguna que no fuera perdida.

Abajo de lo suave crepita la sospecha.

En estas manos.