Caminan bajo la luna, la una al lado de la otra. Madre e hija.
La una piensa que ha avanzado demasiado deprisa en las casillas de la vida y que ya no hay marcha atrás.
La otra piensa que la vida es cruel, traidora y que vivir duele.
La hija coge la mano de la madre.
La madre no se siente tan sola.
La madre pregunta a la hija si le enseñará a leer.
La hija olvida que la vida le parecía injusta hace unos instantes y se ilusiona.
Son dos mujeres que caminan por Mataró.
Quizás un día se sentarán juntas bajo la sombra del baobab, beberán de su fruto y la madre contará a la hija quién era Rama.