El Bien no conduce con menos fuerza al Bien que el Mal al Mal. Aunque no cometa ningún acto malvado, si mi voluntad es la de hacer el mal, llevaré el peso del pecado como si hubiese cometido dicho acto. Pero si mi voluntad es la de hacer el bien, llevaré el mérito de éste en la misma medida. Y al hacer el bien, no importa si lo aplico a cosas grandes o pequeñas, porque no existe diferencia entre una gota y el mar…

Maestro ECKHART