Escena VII

BELISA.— Hijo mío, vengo, antes de marcharme, a prevenirte una cosa. Ahora mismo, al pasar por delante de su alcoba, he visto a Angélica con un hombre que ha huido al verme.

ARGAN.— ¡Mi hija con un hombre!

BELISA.— Sí. Luisa estaba con ellos y te lo podrá contar todo.

ARGAN.— Mándamela aquí, amor mío. ¡La muy sinvergüenza…! ¡Ahora me explico su negativa!