ENSOÑACIÓN DE SEPULCRAVO, SEPTUAGÉSIMOSEXTO CONDE DE GORMENGHAST

… y habrá oscuridad siempre y ningún otro color y las luces se apagarán y los ruidos de mi mente se sofocarán en el espeso y suave plumaje que envuelve todos mis pensamientos con un sudario de innumerables plumas pues han estado allí mucho tiempo mucho tiempo en la garganta fría y hueca de la Torre y seguirán eternamente pues no pueden acabarse los búhos que me acogerán como hijo yo seré el joven discípulo de los grandes búhos me olvidaré de todas las cosas y seré transportado muy lejos a la oscuridad inmemorial donde me reuniré con las sombras de los Groan y el dolor de mi corazón desaparecerá y mis sueños y mis pensamientos e incluso mi memoria y también mis libros dejarán de existir y los poetas se irán para siempre de la enorme torre que se alzaba de día y de noche a todas horas por encima de mis meditaciones se irán todos los grandes escritores que durante siglos han vivido entre las manoseadas cubiertas y cuyas palabras dormían o circulaban por las páginas de pergamino que ya no existen y mi remordimiento se ha acabado por ahora y para siempre pues ya no me quedan ni el deseo ni el sueño y estoy acabado y no deseo más que las garras de la torre y el repentino clamor de las plumas el fin y la muerte y el dulce olvido pues las últimas mareas suben por momentos y mi garganta se pone tensa y redonda redonda como la Torre de los Pedernales y mis dedos se encorvan y anhelo las tinieblas y la roca afilada como una aguja en terciopelo y seré requerido por los poderes y mis inquietudes se acabarán… acabarán… y mi aniquilación será también una consumación porque él ha entrado en la larga estirpe y la hace avanzar y la larga rama muerta de los Groan ha dado paso a la hoja brillante de Titus un vástago mío y no habrá fin y las piedras grises permanecerán para siempre y también las altas torres donde se entretejen las ráfagas de lluvia y las leyes de mi pueblo perdurarán eternamente mientras que mi espectro vagará en la torre con mis grandes compañeros de la oscuridad y mi corriente sanguínea cesará para siempre así como la fiebre que anda a zancadas quiénes son éstos quiénes son tan lejos de mí pero tan enormes tan remotos y enormes Fucsia mi sombría hija tráeme ramas y un ratón de los pastos grises…