XX
VIEJOS FAVORES

La noche siguiente, con ella en su apartamento, descubrí por qué Velasco no quería que me acercase a Vicky. Era evidente: habían estado juntos. Ella misma me lo contó cuando saqué el tema. «Nada serio, fue hace unos meses». Tal vez aún follaban de cuando en cuando, no quise preguntar más. Pero no eran solo celos. Había otra cosa que preocupaba a Velasco: la información.

—¿De qué se conocen Alek y el bocazas de tu ex? —pregunto a Vicky mientras fumamos un porro en la cama, desnudos sobre las sábanas.

—Se conocen desde hace ya mucho, Velasco todavía no era poli. Curraban juntos en las puertas y dando palizas por encargo. Alek entonces no era tan tranquilito como ahora, que se ha empeñado en ser una buena persona. Y Velasco…

—Estaba igual de tarado, ¿no? Ya te vale liarte con él.

—Nene, que yo nunca me arrepiento de nada. —Vicky me da un beso y pone morritos—. ¿Qué pasa? ¿Estás celoso?

—¿De ese bruto psicópata? Para nada. Yo nunca he criticado que al Taj Mahal de la India le hayan puesto nombre de puticlub.

—Pues mejor para ti. Pero que sepas que Velasco es buena gente a su manera. Y conmigo siempre se ha portado bien. Y con Alek. A Alek le salvó la vida.

—¿La vida? ¿Qué hizo? ¿Le ayudó a dejar de fumar?

—No seas tan listillo. —Vicky me vuelve a besar. No soy nada listillo, más bien soy estúpido. No debería verme con ella y aquí estoy: jugándome un divorcio y unas piernas rotas, hecho un campeón.

—¿De verdad que le salvó la vida?

—Que sí. Fue hace muchos años. Alek cortó en la puerta de la Neón a Jorge Duro, el hermano de la Isabel Duro. Le dio una paliza. Sabes quién es, ¿no?

—No. ¿Quién coño es Isabel Duro?

—Puff, nene. Esto va a ser largo. A ver. El hermano mayor de Isabel era Paco Duro, uno de los jefazos de los Florida. ¿Sabes quiénes son los Florida o tampoco?

—¿Los mafiosillos esos de discoteca de los noventa? Sí, esos sí me suenan. ¿No los detuvieron ya hace años?

—No del todo. La mayoría de ellos acabaron muertos, se mataron entre ellos. A Paco Duro se lo cargaron en aquella movida y sus hermanos se quedaron con su negocio pero ya sin los demás Florida. Tienen varias discotecas: la Colt, el Spam, la sala Oil, el Rajá… Isabel es la mayor, vive en un chalé de La Moraleja. Dicen que tiene un guepardo vivo en casa que era de su hermano, de Paco. Maneja mucha pasta de la noche de Madrid. Jorge Duro es el hermano pequeño, tendrá más o menos tu edad, un poco más. Hace ocho años o así intentó entrar en la Neón con zapatillas y Alek no se dio cuenta de quién era y no le dejó pasar. Se puso chulo y al final Alek le acabó dando un par de hostias. Después de aquella casi lo matan. Jorge Duro contrató a unos sicarios para que se cargaran a Alek. Pero Velasco lo arregló.

—¿Cómo?

—A su manera. Entró en la casa de Jorge Duro por la noche con un pasamontañas. Le puso un cuchillo en el cuello y le dijo que como le pasase algo a Alek lo mataría.

—¿Y funcionó?

—Sí, funcionó. Velasco siempre dice que cuando pones a alguien en una situación así, acorralado, solo reacciona de dos formas: o se caga o te mata. Y el Duro se cagó. ¿Tú qué habrías hecho?

—Buena pregunta.