La pasta gusta a casi todos, es rápida de preparar y constituye la base de muchas comidas deliciosas y atractivas. Un plato de pasta con una de las apetitosas salsas que describimos en estas páginas supone una comida completa que puede prepararse en sólo unos minutos, pero también puede servirse como entrante en una comida de celebración. Con un poco más de tiempo nos podemos entretener preparando un maravilloso plato de pasta al horno, como puede ser la lasaña de espinacas, tomate y mozzarella, por ejemplo.
LINGUINE CON NATA Y SALSA DE HIERBAS
Para 4 raciones
INGREDIENTES
15 g de mantequilla
1 chalota o una cebolla pequeña, picada
400 g de nata líquida
sal y pimienta negra en grano, para moler
500 g de linguine
15 ml (1 cucharada) de aceite de oliva
2-4 cucharadas de hierbas frescas picadas, como perejil, cebollino y perifollo
queso Parmesano fresco rallado, opcional
PREPARACIÓN
1 Poner a fuego vivo 4 litros de agua en una cacerola grande, para hervir la pasta.
2 Derretir la mantequilla en una cazuela mediana a fuego moderado, añadir la chalota o la cebolla, tapar y sofreír hasta que esté tierno: 4 minutos.
3 Añadir la nata líquida, llevar a ebullición y cocer, removiendo, hasta que esté espeso y cremoso: 2-3 minutos. Sazonar convenientemente con sal y pimienta negra y mantener caliente.
4 Cuando el agua esté hirviendo, echar la pasta. Llevar a ebullición nuevamente, remover y dejar cocer hasta que la pasta esté al dente: tierna, pero aún un poco cruda en el centro. Probar un trocito para comprobar el punto de cocción.
5 Escurrir la pasta, dejando el agua que queda adherida a ella, y volverla a poner en la cacerola junto con el aceite de oliva, sal y pimienta negra. Remover la pasta para que quede bien cubierta con el aceite.
6 Añadir la salsa a la pasta, junto con las hierbas frescas. Remover la pasta, asegurándose de que quede bien cubierta con la salsa, y servir inmediatamente con queso Parmesano fresco rallado.
FARFALLE CON CREMA DE BRÉCOL
Para 4 raciones
INGREDIENTES
15 g de mantequilla
1 chalota o una cebolla pequeña, picada
400 g de nata líquida
sal y pimienta negra en grano, para moler
125 g de flores de brécol
500 g de farfalle o cualquier otra pasta corta
15 ml (1 cucharada) de aceite de oliva
queso Parmesano fresco rallado, opcional
PREPARACIÓN
1 Poner a fuego vivo 4 litros de agua en una cacerola grande, para hervir la pasta.
2 Derretir la mantequilla en una cazuela mediana a fuego moderado, añadir la chalota o la cebolla, tapar y sofreír hasta que esté tierno: aproximadamente 4 minutos.
3 Añadir la nata líquida, llevar a ebullición y cocer, removiendo, hasta que se forme una crema espesa: 2-3 minutos. Sazonar con sal y pimienta y mantener caliente.
4 Poner el brécol en una cazuela pequeña, añadir agua hirviendo y cocer hasta que esté tierno: entre 2 y 3 minutos. Escurrir bien y verter en una fuente.
5 Para cocer y servir la pasta, seguir los pasos 4 a 6 de la receta de linguine con crema y salsa de hierbas, omitiendo las hierbas frescas en el paso 6.
TAGLIATELLE CON CREMA DE CHAMPIÑONES
Para 4 raciones
INGREDIENTES
15 g de mantequilla
1 chalota o 1 cebolla pequeña, picada
125 g de champiñones pequeños, troceados
400 g de nata líquida
sal y pimienta negra en grano, para moler
500 g de tagliatelle
15 ml (1 cucharada) de aceite de oliva
queso Parmesano fresco, rallado
PREPARACIÓN
1 Poner a fuego vivo 4 litros de agua en una cacerola grande, para hervir la pasta.
2 Derretir la mantequilla en una cazuela mediana a fuego moderado, añadir la chalota o la cebolla, tapar y sofreír durante 2 minutos. Agregar los champiñones y sofreír hasta que estén tiernos: aproximadamente 2 minutos más.
3 Verter la nata líquida, llevar a ebullición y cocer, removiendo, hasta formar una crema espesa: 2-3 minutos. Sazonar con sal y pimienta negra y mantener caliente.
4 Para cocer y servir la pasta, seguir los pasos 4 a 6 de la receta de linguine con crema y salsa de hierbas, omitiendo las hierbas frescas en el paso 6.
SPAGHETTI CON SALSA DE QUESO AZUL
Para 4 raciones
INGREDIENTES
15 g de mantequilla
1 chalota o una cebolla pequeña, picada
400 g de nata líquida
sal y pimienta negra en grano, para moler
500 g de spaghetti
15 ml (1 cucharada) de aceite de oliva
60-125 g de queso Cabrales, Roquefor o Gorgonzola, desmenuzado
queso Parmesano fresco rallado, opcional
PREPARACIÓN
1 Seguir los pasos 1 a 5 de la receta de linguine con crema y salsa de hierbas.
2 Añadir la salsa a la pasta, junto con el queso azul. Remover, asegurándose de que la pasta queda bien cubierta por la salsa, y servir inmediatamente, con queso Parmesano rallado —si se prefiere—.
LASAÑA DE ESPINACAS, TOMATE Y MOZZARELLA
Un plato abundante de lasaña, con una buena cantidad de ensalada y pan, supone una comida perfecta para una fiesta, independientemente de la edad de los invitados. La lasaña es un plato que resulta difícil de preparar —aunque tiene como base dos salsas sencillas, la de tomate y la de bechamel—, pero se puede elaborar con anterioridad y conservar en un lugar fresco o en el frigorífico justo hasta el momento de meterlo en el horno. Para 4 raciones.
INGREDIENTES
15 g de mantequilla
200 g de espinacas congeladas o de hojas tiernas de espinacas frescas
sal y pimienta negra en grano, para moler
250 g de lasaña
1 ración de salsa base de tomate (véase «Recetas: salsas»), preparada con antelación
150 g de queso mozzarella, cortado en lonchas finas
150 ml de nata líquida
1 ración de salsa bechamel (véase «Recetas: salsas») preparada con antelación
30-60 g de queso Parmesano fresco, rallado
PREPARACIÓN
1 Precalentar el horno a 180 °C/gas 4, a menos que se prepare la lasaña con antelación, para hornearla después.
2 Derretir la mantequilla en una cazuela grande a fuego medio, añadir las espinacas y sofreír hasta que estén tiernas: 7 minutos, si se trata de espinacas frescas, y 2-3 minutos si son congeladas. Escurrir bien, presionar para retirar el exceso de agua y sazonar convenientemente con sal y pimienta negra.
3 Cocer la pasta: poner 4 litros de agua en una cacerola grande y llevar a ebullición. Echar varias láminas de pasta en agua hirviendo y cocer durante unos segundos. Sacar las láminas de pasta con una espumadera y colar, teniendo cuidado de que no se peguen. Poner a cocer otra tanda. Repetir hasta que toda la pasta esté hecha.
4 Engrasar una fuente de horno de unos 24 x 32 cm y 7,5 cm de profundidad. Cubrir la base con la lasaña y elaborar las capas de la siguiente manera: la mitad de la salsa de tomate, todas las espinacas, otra capa de lasaña, el resto de la salsa de tomate, toda la mozzarella y el resto de lasaña.
5 Verter la nata en la salsa bechamel y repartir uniformemente sobre la lasaña. Espolvorear la superficie con Parmesano.
Hasta aquí se puede preparar con anterioridad, manteniendo la lasaña ya preparada en un lugar fresco o en el frigorífico hasta el momento de hornear.
6 Hornear la lasaña hasta que se formen burbujas y se tueste la superficie: 40-50 minutos. Servir inmediatamente.
SPAGHETTI CON SALSA DE TOMATES FRESCOS
Aunque ésta es una de las recetas de salsa para pasta más sencillas de preparar, la combinación de pasta cocida en su punto y salsa de tomates frescos es difícil de superar. Una vez familiarizados con la receta básica, se puede variar añadiendo otros ingredientes y sabores a gusto de cada uno. Se pueden utilizar latas de tomate en vez de tomates frescos, que habrá que cocer destapados hasta que la mayoría del líquido se haya evaporado, con el fin de formar una salsa espesa. Para 4 raciones.
INGREDIENTES
45 ml (3 cucharadas) de aceite de oliva
1 cebolla grande, picada
2 dientes de ajo, picados
1 kg de tomates frescos, pelados y picados
sal y pimienta negra en grano, para moler
500 g de spaghetti
queso Parmesano fresco cortado en escamas, opcional
hojas de albahaca frescas, para adornar
PREPARACIÓN
1 Poner a fuego vivo 4 litros de agua en una cacerola grande, para cocer la pasta.
2 Calentar 30 ml (2 cucharadas) de aceite de oliva en una cazuela a fuego medio, añadir la cebolla, tapar y sofreír hasta que esté tierna: aproximadamente 5 minutos. Añadir el ajo y sofreír durante 2 minutos más.
3 Bajar el fuego, agregar los tomates, tapar y cocer hasta que la salsa haya espesado: 10-15 minutos. Sazonar con sal y pimienta negra y mantener caliente.
4 Mientras tanto, cuando el agua empiece a hervir, echar la pasta. Llevar de nuevo a ebullición, remover y dejar hervir hasta que la pasta esté al dente: tierna, pero firme. Probar un trozo para comprobar el punto de cocción.
5 Escurrir la pasta, dejando el agua que queda adherida a ella, y volver a ponerla en la cacerola caliente con la cucharada restante de aceite de oliva. Sazonar con sal y pimienta negra. Remover la pasta, para que quede cubierta con el aceite.
6 Añadir la salsa a la pasta y remover bien, asegurándose de que la pasta queda cubierta por la salsa. Servir inmediatamente, con escamas de Parmesano, si se prefiere, y hojas de albahaca para adornar.
PENNE ARRABBIATA
Se trata de salsa de tomate con un poco de chile, para darle un toque picante. Al igual que la receta anterior es muy fácil de elaborar, pues el plato completo se puede preparar de principio a fin en aproximadamente 20 minutos. Para 4 raciones
INGREDIENTES
45 ml (3 cucharadas) de aceite de oliva
1 cebolla grande, picada
2 dientes de ajo, picados
1 chile verde fresco, sin semillas y picado
2 latas de 400 g de tomates enteros pelados, troceados, con su jugo
sal y pimienta negra en grano, para moler
500 g de penne, o cualquier otra pasta tubular, como por ejemplo rigatoni
queso Parmesano fresco, cortado en escamas, opcional
hojas de albahaca fresca, para adornar
PREPARACIÓN
1 Poner a fuego vivo 4 litros de agua en una cacerola grande, para cocer la pasta.
2 Calentar 30 ml (2 cucharadas) de aceite de oliva en una cazuela a fuego medio, añadir la cebolla y sofreír hasta que esté tierna: aproximadamente 5 minutos. Agregar el ajo y el chile y sofreír durante 2 minutos más.
3 Verter los tomates con su jugo y cocer, destapados, hasta que el exceso de líquido se haya evaporado y la salsa se haya reducido: entre 10 y 15 minutos. Sazonar con sal y pimienta negra y mantener caliente.
4 Mientras tanto, cuando el agua para la pasta esté hirviendo, añadir la pasta. Llevar a ebullición nuevamente, remover y dejar hervir hasta que esté al dente: blanda, pero firme al morderla. Morder un trozo para comprobar el punto de cocción.
5 Escurrir la pasta, dejando el agua que queda adherida a ella, volver a poner en la cacerola caliente, junto con la cucharada restante de aceite de oliva, y sazonar con sal y pimienta negra. Remover la pasta, para que quede cubierta con el aceite.
6 Añadir la salsa a la pasta y remover bien, asegurándose de que queda bien cubierta por la salsa. Servir inmediatamente, con las escamas de Parmesano, si se desea, y hojas de albahaca fresca para adornar.
RIGATONI CON TOMATE, BERENJENAS Y PIMIENTOS ROJOS
Esta salsa combina muy bien con pasta tubular; como por ejemplo rigatoni, o con pasta larga, como spaghetti. Si se cuece lentamente, resulta mejor que las salsas de tomate que aparecen anteriormente, convirtiéndose en una salsa muy sabrosa que resulta deliciosa si se acompaña de una ensalada verde y un vaso de vino tinto. Para 4 raciones.
INGREDIENTES
45 ml (3 cucharadas) de aceite de oliva
1 cebolla grande, picada
1 berenjena mediana, cortada en dados pequeños
1 pimiento rojo, sin corazón ni semillas, cortado en dados pequeños
1 diente de ajo, picado
2 latas de 400 g de tomates enteros pelados, troceados, con su jugo
sal y pimienta negra en grano, para moler
500 g de rigatoni
queso Parmesano fresco en escamas, opcional
hojas de albahaca fresca, para adornar
PREPARACIÓN
1 Calentar 30 ml (2 cucharadas) de aceite de oliva en una cazuela a fuego medio, añadir la cebolla, tapar y sofreír hasta que esté tierna: aproximadamente 5 minutos. Agregar la berenjena, el pimiento y el ajo, tapar y sofreír durante 5 minutos más, removiendo de vez en cuando.
2 Verter los tomates con su jugo, bajar el fuego y cocer lentamente, destapados, hasta que el exceso de líquido se haya evaporado y se forme una salsa espesa, con el aspecto de un puré: entre 20 y 25 minutos. Sazonar con sal y pimienta negra y mantener caliente.
3 Poner a fuego vivo 4 litros de agua en una cacerola grande y llevar a ebullición. Echar la pasta, remover y dejar hervir hasta que esté al dente: blanda, pero firme al morderla. Probar un trozo para comprobar el punto de cocción.
4 Escurrir la pasta, dejando el agua adherida a ella, volver a ponerla en la cacerola caliente junto con una cucharada del aceite restante y sazonar con sal y pimienta. Remover la pasta para que quede cubierta por el aceite.
5 Verter la salsa y mezclar con la pasta. Servir inmediatamente espolvoreando las escamas de Parmesano, si se quiere, y adornando con las hojas de albahaca.